Nikola Cvetinovic en la comparecencia de este martes. FOTO: Mariano González
Nikola Cvetinovic en la comparecencia de este martes. FOTO: Mariano González
Nikola Cvetinovic en la comparecencia de este martes. FOTO: Mariano González
Baloncesto  |  CB Valladolid

"Echar al entrenador no es la solución"

7 de Enero de 2014
El tema del día era, sin duda, la reacción de buena parte de Pisuerga contra Ricard Casas el pasado sábado, una vez el equipo perdió ante el GBC tras un último cuarto para olvidar. Primero fue Sito Alonso, en sala de prensa, quien sacó la cara por su compañero. Y, con el comienzo de la nueva semana, han sido los jugadores. En concreto, Marcos Suka-Umu, quien ha declarado que “en algunos clubes podría funcionar el echar al entrenador, pero en éste es difícil, no creo que fuera positivo”, y Nikola Cvetinovic, que considera que “la gente no sabe el gran trabajo que realiza todo el cuerpo técnico”. El serbio se ha mostrado conciliador y positivo ya que, además de resaltar el trabajo del entrenador, no ha dudado en afirmar que “muy pronto las cosas van a cambiar”.


Respecto al encuentro del pasado sábado, Cvetinovic, uno de los más destacados, ha reconocido que “nunca te sientes bien después de perder, no estamos preparados para ello. La solución es saber competir, pero no sólo unos minutos, sino todo el partido”, declaraba. Para ello, el ala-pívot morado tiene una receta: “Estamos trabajando y preparándonos para superar los bajones mentales que sufrimos”. En esta línea se situaba Suka-Umu. El madrileño afirmaba que “el análisis es difícil, porque llevas todo el partido compitiendo y nos caemos estrepitosamente al final”. Una de las causas para el alero es el vaivén continuo de jugadores porque “cada semana tenemos que reinventarnos. Con tantos cambios no tenemos claro quiénes son nuestros referentes adelante y atrás”, aseguraba para finalizar con una frase tan acertada como esclarecedora: “Cuando viene un jugador nuevo perdemos demasiado tiempo en adaptarlo a la dinñamica”.


Finalmente, Suka-Umu fue preguntado por el talón de Aquiles que viene padeciendo el CB Valladolid durante los últimos años: los retrasos en las nóminas. El jugador morado los reconoce pero, a su vez, resta importancia a la situación: “No estamos con todos los pagos al día pero no es para ponerse nerviosos ni creo que vaya a afectar al equipo”.