Revolución copera
Balaídos aguarda. El Celta medirá el verdadero nivel de los suplentes en una eliminatoria a partido único en la que está en juego empezar a enfrentarse a los equipos de Primera División. Un choque que será diferente al que ambos conjuntos disputaron semanas atrás, pues los menos habituales, en una semana cargada de partidos y desplazamientos, pondrán todos su empeño por acceder a la siguiente fase y presentar sus credenciales.
La moneda se lanzará al aire en otro horario inusual (12,00 horas) en el que Djukic presentará un once novedoso a más no poder y una convocatoria con hombres inéditos y hasta seis jugadores procedentes del filial.
Ya esta mañana se podía ver entrenándose en los anexos, apartados de sus compañeros, que lo hacían a puerta cerrada en Zorrilla, a los titulares ante el Almería más Alberto Bueno. Pistas para una lista de dieciocho futbolistas en la que han entrado Manucho y Razak.
De este modo, Djukic viajará junto a Dani Hernández, Razak, Marquitos, Juanito, Baraja, Jofre, Jorge Alonso, Peña, Rubio, Varela, Aquino y Manucho más los canteranos Villanueva, Felipe, Jordi, Mongil, Ochoa, y Javi Navas. Así, el previsible once que puede alinear Djukic es el compuesto por Dani Hernández; Varela, Mongil, Juanito, Peña; Jofre, Baraja, Álvaro Rubio, Marquitos, Jorge Alonso; y Aquino.
Sobre ello, habló el técnico este martes en rueda de prensa. Explicó las rotaciones, qué es lo que pretende de ellas y lo que espera del partido ante el conjunto gallego, del que recela a pesar del mal momento que atraviesa.
"Quiero aprovechar una plantilla amplia para afrontar las dos competiciones con garantías y la gente está fresca y preparada. Que vean que todos cuentan. El equipo que va a jugar en Vigo es de plenas garantías y está preparado para competir con Celta o cualquiera. Los que han soportado la carga de Almería descansan Llevo a gente comprometida y que está entrenando muy bien", declaró Miroslav Djukic, que también se ha visto condicionado por los desplazamientos de esta semana para realizar la convocatoria.
De hecho, recalcó que "en el Real Valladolid no se puede despistar ni relajar nadie", ni él mismo. "Quiero a todos los jugadores enchufados porque si te descuidas a lo mejor no vuelves. Y todos, hasta los que menos han jugado, pueden revertir su situación. No lo descarto. En la historia del fútbol hay muchos casos así". "Si alguien no entrena bien no lo llevaría en la vida -expresó al ser preguntado por Manucho-. Estoy contentísimo con cómo trabaja la gente. Tienen que entenderme a mi, que tengo que tomar decisiones. Cada convocatoria no es fácil para mi. En cada una de ellas hay muchas personas descontentas", dijo.
Pretende inculcar "una mentalidad ganadora", la que se presupone en un club como el Valladolid "que quiere estar en todo y llegar lo más lejos posible". "Queremos gente comprometida, con ambición, es la que queremos inculcar desde el principio. En todos los partidos queremos mandar y ganar los partidos", subrayó Djukic, que desdramatizó unas recientes declaraciones de Jofre en las que expresaba su malestar por no entrar en las últimas convocatorias de Liga.
"No tiene ninguna importancia. Entiendo su descontento. Es normal. Trabaja bien. No se ha salido de faltar el respeto a nadie. Lo malo sería que esté contento con no jugar", apuntó Djukic que, por otro lado, resaltó la obligatoriedad de que "todo el mundo esté implicado en la tarea defensiva".
Por último, Djukic explicó que su expulsión en los compases finales del partido ante el Almería (la suspensión no contabiliza para la Copa) atendió a que pegó un pelotazo a un balón. "Podrían avisarlo. A los entrenadores se les expulsa enseguida. Fue por frustración, pero creo que los errores de las últimas jornadas son equivocaciones puntuales. A veces explotas y ya está", sentenció.