1-1: Atasco en Montilivi
La buena actuación de Jaime Jiménez en la portería y la ineficacia ofensiva del Girona evitaron que el Real Valladolid perdiese en tierras catalanas por primera vez esta temporada. Fue finalmente un empate, primero también del curso liguero, lo que cosechó el equipo de Miroslav Djukic en Montilivi.
Espeso y con problemas. Desconocido e inoperante. El equipo blanquivioleta fue el de la primera parte en Zorrilla frente al Córdoba, con la diferencia de que no mejoró en la segunda. Hubo sorpresa de inicio y el técnico serbio dejó en el banquillo al riojano Álvaro Rubio. Su inadvertida actuación en el último partido de Liga y el buen hacer de Javi Baraja en el duelo copero devolvieron la titularidad y el brazalete de capitán al vallisoletano. Estuvo solo, demasiado. El 4-1-4-1 obliga a Óscar González y a Jorge Alonso a un sacrificio de recorrer metros para facilitar la salida del balón. No se entendían. Y ello, sumado a que ni los laterales ni Nauzet Alemán estaban enchufados, formaba unas distancias entre los jugadores blanquivioleta que por momentos parecían kilométricas.
Pese a ello, el Pucela gozó de alguna oportunidad en la primera parte. Prieto Iglesias anuló un gol a Óscar tras centro de Sisi al considerar que el balón había salido por la línea de fondo. Nada aclaró una pésima repetición. Bueno, que fue de más a menos pero sin encontrase cómodo en ningún momento, cerca estuvo de rematar un buen centro de Tekio. El joven lateral sufrió en defensa y se atrevió muy poco en ataque. En una carga excesiva, cerca estuvo de cometer penalti sobre Nieto, que fue una pesadilla para la zaga vallisoletana.
L a suerte sonrió al Real Valladolid a cinco minutos del descanso. Un balón que llegó desde la izquierda y que intentó enchufar Alberto Bueno acabó tras un rechazo en las botas de Óscar González, que con su habitual clase lo hizo fácil para superar a Santamaría.(0-1) Injusto pero bienvenido gol para el equipo de Miroslav Djukic.
No tardó, sin embargo, en llegar el castigo. En un córner que el Girona sacó raso y fuerte a ver qué pasaba, pasó que Rueda la pifió y su caraja se contagió al resto de los que defendían el saque esquina. Migue fue más listo que los demás y batió a Jaime Jiménez, que encajaba un gol por primera vez esta temporada.(1-1)
Tras el descanso, el Valladolid pareció salir con más ganas y dispuesto a repetir la película vista frente al Córdoba: charla de Djukic y mejora. Fue un espejismo que tan solo duró cinco minutos. Jorge Alonso se quedó en el vestuario y entró Víctor Pérez, pero el ex del Huesca aportó lo mismo. Poco. Muy poco. Tampoco Jofre Mateu, que sustituyó a Sisi. Y menos Javi Guerra, que entró en detrimento de Alberto Bueno para jugar sus primeros minutos en partido oficial de la 2011/2012 y apenas tocó el balón.
En el tramo final peligró hasta el empate. Los cambios de Raúl Agné, que dio entrada a Moha y Ion Vélez, pusieron en problemas a un Jaime Jiménez que lo paró todo. Renunció el Pucela a sumar los tres puntos y prefirió atar uno, que suma 7 en tres jornadas y le mantiene invicto.