(Avance) 5-1: Una victoria plácida
Las cosas empezaron bien para los de Abel tras un gol de Jordi nada más comenzar el encuentro a la salida de un córner. Un gol en propia puerta de Matabuena igualaba la batalla, pero el Real Valladolid siguió controlando el juego y mostrándose incisivo en los metros finales. Además, estaba inspirado, sobre todo Óscar, que colocó un disparo seco en la escuadra derecha en el 22. Nafti volvió a ver portería en el 35, pero en la buena, también con un buen disparo desde la frontal. Finalmente, Óscar volvió a destapar el tarro de las lindas y oníricas esencias para echar el telón del primer acto y, por ende del encuentro, con una sutil y elegante vaselina tras el error en la entrega de Alberto García.
El Córdoba de Lucas Alcaraz era un cadáver, como evidenció en un segundo tiempo en el que el Guerra no faltó, casi sin enterarse, a su cita con el gol, y Zorrilla se divirtió con la seguridad y solvencia del equipo en una segunda parte más aburrida.