La alemana Becker, la más rápida en Valladolid
En una mañana marcada por el calor, por el viento en el algunos tramos de la carrera y por el control del pelotón durante muchos minutos, la prueba de la Copa del Mundo nos dejó una clase de buen ciclismo, pero sobre todo en los instantes finales de la carrera. La competición arrancó pasadas las diez de la mañana desde la Plaza Zorrilla, para sorpresa de muchos vallisoletanos que sabían a ciencia cierta quién eran esas que marchaban en solitario y con absoluta tranquilidad por el centro de la capital vallisoletana, dirección Tordesillas.
Hasta el kilómetro 85 todos los intentos de escapada fueron anulados por un pelotón que no quería sorpresas. Sin embargo, cuando el grupo atravesó la localidad de Peñaflor comenzó la batalla definitiva. La aparición del viento rompió en pelotón en dos grupos, y del primero saltó a su vez un trío formado por las alemanas Charlotte Becker (Cervelo) y Judith Arndt (Columbia) y por la holandesa Van Vleuten (Nederland) que tomarón la ventaja suficiente para entrar en solitario por la calles de Valladolid.
Por delante todavía un circuito por la zona del Campo Grande, Caballería y el Paseo Isabel La Católica, que debían completar en tres ocasiones, pero donde el trío delantero supo controlar la ventaja para jugarse el triunfo de etapa, ya que además por detrás no hubo la necesaria colaboración de los equipos más fuertes para reducir la diferencia.
Un sprint final donde la corredora del Cervelo fue la más rápida, por delante de su compatriota Arndt y la holandesa. A poco más de un minuto entraba el primero de los grupos perseguidores, con la líder de la Copa del Mundo, la holandesa del Nederland Marianne Vos ocupando la cuarta plaza y defendiendo su privilegiada posición. La mejor española fue la navarra del Bizkaia-Durango, Cristina Alcalde, que ocupó el puesto 30 de la general, mientras que la vallisoletana Rosa Bravo terminió en la posición número 38 de las 99 corredoras que terminaron la prueba, de las 121 que tomaron la salida.