Un pase y otro empate
Las Panteras, a las semifinales de la Copa. El cuadro femenino ganó a Jujol (0-4) y a Vila-Real (3-1) y espera rival. El CPLV San Gregorio cayó en la prórroga ante Castellbisbal y se complica el pase. Los chicos tienen la obligación de ganar en la jornada matutina de este sábado al cuadro anfitrión, el Sant Andreu.
Las buenas noticias llegaron de la mano de las Panteras. Tenían que ganar sus dos compromisos de hoy para acceder a las semifinales tras el empate de la primera jornada y cumplieron con creces. Primero ante Jujol, con un claro 0-4, con tantos de Lucía Ruiz, Julia Fouz (2) y Laura Alvarado. Las vallisoletanas, esta vez sí, encontraron pronto, a los 2 minutos, el camino del gol. Y eso las permitió jugar con mayor tranquilidad, aprovechando sendas expulsiones de las catalanas para ampliar su renta mediados tanto el primer como el segundo tiempo, para certificar la goleada en el último minuto en un buen encuentro.
Luego repitieron victoria contra el Ciutat de Vila-Real (3-1) para certificar su clasificación. Lucía Ruiz y Verónica Ibáñez adelantaron a las vallisoletanas, que tuvieron el choque controlado a pesar de que las castellonenses acortaran distancias a 8 del final. Irina Martínez certificó el triunfo. Mañana, a las 17.00 o a las 18.30 horas (en función de si su rival es Rubí o Tres Cantos), buscará el pase a la final del domingo.
Por su parte, las noticias negativas llegaron con el CPLV San Gregorio. Tras su empate, perdiendo en la prórroga con mucha polémica de la primera jornada ante Rubí, los vallisoletanos también tenían que ganar sus dos partidos para estar en las semifinales. No lo lograron en el primero del viernes, ante Castellbisbal, y ahora están obligados a hacerlo ante Sant Andreu. Los de Nathan Sigmund no se encontraron cómodos sobre la pista y cayeron en la trampa de su rival, sufriendo los rigores de las expulsiones de la pareja de colegiados.
A pesar de adelantarse en el marcador, por medio de David Pérez, vieron cómo Pol Olivella y Oriol Argullos, en una superioridad, daban la vuelta al electrónico. Guille Jiménez puso el 2-2 antes del descanso, pero nada más comenzar la segunda parte, los catalanes volvieron a coger ventaja con un tanto de Jordi Colás. Con cambio de portero, entrando Nacho Pelayo por Jerry Kaukinen, el CPLV se lanzó a por el empate mientras los árbitros no paraban de expulsar jugadores, siendo muy perjudicado el cuadro pucelano. Nathan Sigmund, a falta de 3 minutos, hizo el 3-3 sin tiempo para más al quedarse con uno menos el CPLV. En la prórroga se repitió el guión, hasta que los vallisoletanos acabaron con dos menos sobre la pista, recibiendo el definitivo gol de la derrota a 1.12 de la tanta de penaltis, por medio de Pol Olivella. Gracias al empate entre Rubí y precisamente Sant Andreu, un triunfo ante el anfitrión metería a los vallisoletanos en semifinales.