Momento de la rueda de prensa. FOTO: Valladolid Deporte
Baloncesto | CB Valladolid
"Nos hemos quedado sin madre"
1 de Octubre de 2014
"Teníamos al padre, que es Román (Montañez), y nos hemos quedado sin la madre. Estamos puteados". Así describía Porfi Fisac, gráficamente, cómo se encuentra ante la baja definitiva de Eduardo Hernández-Sonseca. Pero esto es el final, la consecuencia de una serie de actos que han causado un destrozo deportivo de grandes proporciones en el CB Valladolid, un paso atrás demasiado grande en relación a los avances que se habían conseguido, en cuanto a imagen, este verano.
Como ya se ha explicado demasiado, el caso Sonseca es la enésima parte de un caso que comienza con Othello Hunter. Los impagos al jugador provocan su marcha y la posterior denuncia al club. La FIBA, inicialmente, da la razón a la entidad morada pero, al recurrir el jugador americano, el CB Valladolid no se persona y el juez falla en favor de Hunter. A partir de ahí, se suceden los trámites hasta que, el 9 de abril de 2014, el máximo organismo internacional sanciona al conjunto morado a pagar alrededor de 85.000 euros al afectado y, hasta que haga efectivo esa cantidad, no podrá fichar jugadores procedentes del extranjero.
Contado todo al detalle, este verano llega la posibilidad de incorporar a Eduardo Hernández-Sonseca y, confirmado por Felipe Martín, a David Ortega. Uno procedente de Bélgica y otro de Francia. El CB Valladolid solicita el transfer y la Federación Belga lo envía, no así la francesa. Este documento se traslada a las oficinas de Pisuerga con copia a la FIBA. Una vez recibido, la directiva pucelana gestiona, en connivencia con la Federación Española de Baloncesto, la ficha correspondiente y, al reunir los ocho jugadores senior necesarios para formalizar la inscripción, es cuando la FIBA lo echa para atrás e impide diligenciar el trámite de Hernández-Sonseca.
Estos son los hechos, que ha explicado Felipe Martín, vicepresidente del CB Valladolid, junto a Porfi Fisac en la tarde del miércoles. Ahora es cuando vienen las explicaciones. En primer lugar, las "garantías" que ofrecían la FEB y la propia FIBA, a través de segundas personas, eran cenizas en el aire: "No teníamos ningún documento que nos asegurara que podíamos diligenciar la ficha", reconocía Felipe Martín, "a través de las federaciones (española y regional) todo se ha comentado de viva voz". Repetimos, cenizas en el aire.
"Esto no se destapa si no hay alguien malintencionado"
Otra de las cláusulas a las que se agarró el CB Valladolid fue la que dice que un jugador de formación cuya primera ficha federativa haya sido formalizada en España puede fichar por un club bajo sanción federativa. Pero tampoco hubo luz al final de este túnel.
Lo que sí quisieron dejar claro tanto Felipe Martín como Porfi Fisac fue que "FIBA nos dijo verbalmente, a través de la FEB, que sí que podíamos hacerlo; ahora nos dice que no". Además, apuntaron a algún ente, club o persona, que ha llamado la atención de la Fedaración Internacional para poner el ojo en el CB Valladolid: "Esto no se destapa si no hay alguien malintencionado porque, para algunos, estamos donde no debemos estar", explicaba Fisac.
Así, la única solución que puede desbloquear esta situación, como ya dijimos hace semanas, es muy sencilla: pagar. Porque la FIBA es meridianamente clara en su laudo arbitral y, como ha confirmado Felipe Martín, los representantes de Othello Hunter no van a flexibilizar el pago, quieren la cantidad en mano y, sólo así, se eliminará la sanción.
Deportivamente, un equipo diferente
También hay que señalar la complicada situación del propio Eduardo Hernández-Sonseca: sin equipo y sin contrato a dos días del inicio de la LEB Oro. En este sentido, Porfi Fisac quiso dar la cara: "Tenéis razón, hemos hecho cosas mal. Yo soy el representante deportivo, el responsable y tengo que pedir disculpas a Eduardo Hernández-Sonseca porque está sin trabajo y sin contrato", admitía el segoviano.
En el aspecto deportivo, Fisac fue mucho más elocuente, ya que reconoció que "nos hemos quedado sin madre. Román (Montañez) era el padre y Edu era la madre. Sin él somos otro equipo. Estamos puteados". El futuro pinta negro y, en palabras de Porfi, "será difícil traer a alguien". Este contratiempo, según parece, no ha hecho mella en el entrenador, quien ha declarado que "prometo que no se me ha pasado por la cabeza dejar el club".