Un MVP agridulce

Con unos números espectaculares, Jason Rowe alcanzó el MVP de la jornada 7 de la ACB. El pequeño jugador morado alcanzó los 23 puntos, 5 rebotes, 6 asistencias y 3 robos de balón en 34 minutos, para sumar 29 de valoración y hacerse con el trofeo de mejor jugador. Pero el americano lo hubiera cambiado por una victoria del equipo: “Definitivamente, sí. Estoy decepcionado por haber perdido, ya que hubo puntos clave que hicieron que no pudiéramos conseguir ganar”, además de añadir que conseguir el MVP “es una sensación agridulce porque está bien para mí, pero el objetivo del equipo es conseguir la victoria”, sentenció Rowe.

Respecto al partido, Jason Rowe declaró que fue “engañoso, porque íbamos perdiendo de diez, pero a falta de 38 segundos nos pusimos a cinco”. El jugador reconoció que no había visionado aún el encuentro para analizar su gran actuación y que se encuentra “muy cómodo. Todo lo que tengo alrededor está bien y mi adaptación a la ACB va por buen camino”.

El técnico catalán atendió a la prensa y explicó que han decidido prescindir de Akeem Wright por “razones deportivas. Tenía una cláusula en el contrato a nivel deportivo y la hemos ejecutado”. El jugador permanecerá entrenando toda esta semana porque su compromiso expira el domingo y Casas considera que aún puede ayudar. La decisión del CB Valladolid ha sido asumida por Wright “con profesionalidad y la relación es buena”.

Su sustituto, Drew Viney, ha sido descrito por el entrenador morado como un “jugador joven, con talento en la mano, que puede jugar en las posiciones de “3” y de “4” y que aportará buena mentalidad ganadora. Tiene tiro exterior y traerá máximo esfuerzo”, explicaba, además de confirmar que entrenará el jueves y se espera su presencia para el partido contra Bilbao Basket.

En otro orden de cosas, la marcha de Vasilopoulos a Grecia para tratarse de su lesión era de sobra conocida por el entrenador: “Me pidió permiso. Necesita estar mentalmente confiado, por encima del aspecto físico”. Al igual que Viney, el griego debería estar disponible para jugar el sábado, “si nuestro equipo médico lo apoya”, matizó Ricard Casas.