Djukic exige perfeccionar

Fue su mensaje más sonoro y concreto en este soleado jueves de invierno. "Se terminaron las vacaciones y las felicitaciones. Ahora viene la realidad. Queda mucha liga y no nos podemos despistar porque no nos sobra nada. Va a costar cada vez más marcar y ganar en cada partido y debemos estar todos preparados para dar un plus y cumplir el objetivo", espetó.

Y es que Djukic incidió en la necesidad de que tanto el como sus pupilos estén a tope en lo que queda de campeonato. Exigencia personal máxima para "hacer cosas bien". "Falta mucho. Hemos tomado contacto con Primera y ahora es el momento de perfeccionar y ser exigentes. Tenemos mimbres para ello", recalcó.

A renglón seguido se refirió al contrincante para este domingo (12,00 horas, Balaídos), el Celta de Vigo, un rival directo en la pugna por la permanencia que el Real Valladolid conocer "perfectamente" dados los enfrentamientos de la pasada campaña en la categoría de plata del balompié español.

"Le gusta tocar, jugar con gente rápida arriba. Tendremos que estar al cien por cien para sacar algo positivo. Los partidos contra el Celta son muy disputados, muy duros. Somos dos equipos que intentan jugar. No podemos cometer pérdidas, porque con sus contras rápidas te pueden matar", analizó el preparador serbio, que reiteró la obligatoriedad de mostrarse "intensos y agresivos" para robarle la manija al cuadro celeste.

Respecto a las bajas que arrastra el equipo (Rueda y Ebert -lesionados, Óscar -sancionado- y Manucho -en la Copa África-) Djukic admitió que son "bastantes" e "importantes", pero, una vez más, aclaró que "no" llora y que los jugadores que ocupen su puesto están "perfectamente preparados para competir".

Uno de ellos es el ariete sueco Daniel Larsson, fichaje para el mercado invernal al que el técnico ve "perfectamente" preparado para competir tras un mes y medio ejercitándose con el grupo. "Estáa adaptado a nuestro sistema y preparado para rendir. Nos puede aportar cosas positivas", agregó.

Para finalizar indicó que Rueda hizo "una tontería" cuando intercambió un par de frases con el colegiado del Valladolid-Barcelona en el descanso y en el túnel de vestuarios. Palabras que le han costado dos partidos de sanción.

No obstante, Djukic matizó: "Estaba donde no tenía que estar pero es un simple comentario. Me gustaría que en el acta se pusiese también lo que dicen ellos. "Se debían poner las contestaciones de los árbitros, porque lo mismo provocan. Así mejoraríamos", sentenció.