Djukic y Rueda bromean al final de un entrenamiento. Foto: valladoliddeporte.es
Fútbol | Real Valladolid
Djukic, los detalles y la ley del Karma
16 de Febrero de 2012
Un repaso a la actualidad blanquivioleta meticuloso en el que Djukic incidió en que la derrota cordobesa (2-0) no ha influido en el ánimo de un plantel al que ve "entero". Ahondó en la obligatoriedad de cuidar los detalles que definen resultados en los próximos compromisos ante rivales directos como el Córdoba y cautivó con su convencimiento de que la "energía positiva" que Javi Guerra fabrica estando "metido y trabajando", como no duda que viene haciendo, se transformará en "goles". También deslizó que él no busca excusas, sino que vierte datos verídicos.
En primer lugar se le cuestionó por Óscar, quien estará tres semanas de baja por una rotura de fibras en el sóleo de la pierna izquierda que el preparador serbio recordó se produjo en el descanso del partido ante el Córdoba. "Es una baja importante, pero nunca me quejo. Hay otros jugadores que quieren demostrar que su sitio está entre los once", indicó.
A renglón seguido se mencionó la derrota ante el Córdoba y el estado del equipo después de que se truncase una racha de doce enfrentamientos consecutivos puntuando. "Alguna vez tiene que tocar. Le veo entero. Ningún problema. Hemos perdido, pero se puede perder. La actitud del equipo fue buena. No jugamos bien pero también es difícil jugar contra rivales directos, en los que decidirán detalles. Es muy importante cuidar los detalles. Estar bien en defensa para aprovechar las oportunidades", dijo.
Un partido en el que, minutos más adelante, el devenir de la rueda de prensa volvió a desembarcar...
"Ante el Córdoba, el principal problema fueron los minutos iniciales, en los que los jugadores no pudieron mantenerse en pie en el área -por el hielo, según esgrimió días atrás-. Nos afectó. En ningún momento fue una excusa. Era sólo un dato. Nunca busco excusas. No tengo problema en asumir mis responsabilidades. Como tampoco es excusa que no hemos tenido el balón y hemos sido imprecisos. Culpa nuestra. Fue un partido muy difícil, muy duro y que se disputaba en 40 metros. El Córdoba no jugó a nada", replicó.
Por todo ello, recalcó que no está preocupado, que su "modus operandi" se vertebra en "ser profesional" y "no" tambalearse por "las emociones". "Siempre les digo a mis jugadores que tenemos que estar equilibrados y no tambalearnos. Sabemos dónde estamos y no debemos regirnos por lo que se dice por fuera. Me rijo por datos objetivos e imágenes. No estoy preocupado, pero está claro que siempre el equipo está triste cuando pierde. Queremos ganar el título y cuando pierdes no estás contento", apuntó.
Y como un clavo saca otro clavo, el Real Valladolid necesita desquitarse de este pinchazo con una victoria en casa ante el Girona, penúltimo clasificado. Pero Djukic, obviamente, no se fía. "No hay enemigos pequeños. Sí mucha igualdad. Es un equipo organizado que seguramente se cerrará bien atrás y buscará su oportunidad a la contra. Tenemos que estar preparados y evitar pérdidas o contraataques", reflexionó.
Además se refirió a la twitter-discusión de Javi Guerra y acabó apelando a la doctrina básica del Karma, que podría resumirse con el refranero castellano: el que siembra, recoge. "Javi Guerra es un tipo que vive de los goles. Él tiene una losa sobre su espalda, el hecho de que el año pasado marcase treinta goles. Todo el mundo le exige, pero a mi me importa Guerra metido y trabajando en lo que tiene que hacer. De esta energía positiva los goles vendrán solos. Estamos tranquilos siempre y cuando Guerra hace trabajo para el equipo", apuntó.
Hay plena confianza en él y su socio deberá ser otro tras lesionarse Óscar. Todas las miradas apuntan a Alberto Bueno y Djukic dijo que tiene la oportunidad y que confía en él para que "salga al campo y demuestre que es uno más, ya que es un jugador de muchísima calidad", sentenció.
En primer lugar se le cuestionó por Óscar, quien estará tres semanas de baja por una rotura de fibras en el sóleo de la pierna izquierda que el preparador serbio recordó se produjo en el descanso del partido ante el Córdoba. "Es una baja importante, pero nunca me quejo. Hay otros jugadores que quieren demostrar que su sitio está entre los once", indicó.
A renglón seguido se mencionó la derrota ante el Córdoba y el estado del equipo después de que se truncase una racha de doce enfrentamientos consecutivos puntuando. "Alguna vez tiene que tocar. Le veo entero. Ningún problema. Hemos perdido, pero se puede perder. La actitud del equipo fue buena. No jugamos bien pero también es difícil jugar contra rivales directos, en los que decidirán detalles. Es muy importante cuidar los detalles. Estar bien en defensa para aprovechar las oportunidades", dijo.
Un partido en el que, minutos más adelante, el devenir de la rueda de prensa volvió a desembarcar...
"Ante el Córdoba, el principal problema fueron los minutos iniciales, en los que los jugadores no pudieron mantenerse en pie en el área -por el hielo, según esgrimió días atrás-. Nos afectó. En ningún momento fue una excusa. Era sólo un dato. Nunca busco excusas. No tengo problema en asumir mis responsabilidades. Como tampoco es excusa que no hemos tenido el balón y hemos sido imprecisos. Culpa nuestra. Fue un partido muy difícil, muy duro y que se disputaba en 40 metros. El Córdoba no jugó a nada", replicó.
Por todo ello, recalcó que no está preocupado, que su "modus operandi" se vertebra en "ser profesional" y "no" tambalearse por "las emociones". "Siempre les digo a mis jugadores que tenemos que estar equilibrados y no tambalearnos. Sabemos dónde estamos y no debemos regirnos por lo que se dice por fuera. Me rijo por datos objetivos e imágenes. No estoy preocupado, pero está claro que siempre el equipo está triste cuando pierde. Queremos ganar el título y cuando pierdes no estás contento", apuntó.
Y como un clavo saca otro clavo, el Real Valladolid necesita desquitarse de este pinchazo con una victoria en casa ante el Girona, penúltimo clasificado. Pero Djukic, obviamente, no se fía. "No hay enemigos pequeños. Sí mucha igualdad. Es un equipo organizado que seguramente se cerrará bien atrás y buscará su oportunidad a la contra. Tenemos que estar preparados y evitar pérdidas o contraataques", reflexionó.
Además se refirió a la twitter-discusión de Javi Guerra y acabó apelando a la doctrina básica del Karma, que podría resumirse con el refranero castellano: el que siembra, recoge. "Javi Guerra es un tipo que vive de los goles. Él tiene una losa sobre su espalda, el hecho de que el año pasado marcase treinta goles. Todo el mundo le exige, pero a mi me importa Guerra metido y trabajando en lo que tiene que hacer. De esta energía positiva los goles vendrán solos. Estamos tranquilos siempre y cuando Guerra hace trabajo para el equipo", apuntó.
Hay plena confianza en él y su socio deberá ser otro tras lesionarse Óscar. Todas las miradas apuntan a Alberto Bueno y Djukic dijo que tiene la oportunidad y que confía en él para que "salga al campo y demuestre que es uno más, ya que es un jugador de muchísima calidad", sentenció.