Javi Guerra, cabizbajo en un encuentro anterior. Foto: Photogenic.
Javi Guerra, cabizbajo en un encuentro anterior. Foto: Photogenic.
Javi Guerra, cabizbajo en un encuentro anterior. Foto: Photogenic.
Fútbol  |  Real Valladolid

Obsesión extirpada

9 de Enero de 2012
Escrito por
Antonio Aragón

Y es que, un ariete amamanta su confianza con goles (hasta la fecha lleva ocho). Vive de celebrarlos, de escuchar el estremecer del graderío y sentir el jubiloso abrazo de sus compañeros. Javi Guerra no iba a ser menos y a pesar de que sus guarismos no eran para nada malos, palpitaba la sensación de que el malagueño no se encontraba en su mejor momento. Quizás se hallaba algo abstraído.

Djukic lo dejó entrever en la rueda de prensa posterior al choque ante el Sabadell. "El Javi Guerra de hoy es el que yo quiero; no por los goles, sino por la buena actitud que ha demostrado. Las dianas siempre vienen como consecuencia de algo. Hoy estuvo muy metido en el partido, fue el jugador que nosotros queremos".

Un "truco de chistera" que dibuja un Javi Guerra "feliz, súper contento". Auspicia que afloren ánimos renovados que el punta espera sirvan para que su "confianza" crezca y, así, mantenga el epicúreo idilio con el gol. "El fútbol funciona así y hay que hacer gol siempre. Los delanteros vivimos de rachas. En mi carrera siempre de Navidad a final de temporada es cuando lo hago mejor. No sé si es porque a lo mejor cojo un tono físico óptimo y hago más goles. Esperemos que este año siga igual", agregó.

El objetivo es diáfano. Su voluntad es hacer goles que sirvan "para ayudar al equipo a subir a Primera" y, "si no", que le valgan a él "para jugar en un sitio mejor". En este sentido, se le cuestionó por la posibilidad de que en el mercado de invierno algún equipo vuelva a interesarse por sus servicios, ante lo que aseguró: "Me parece bien. Ojalá meta diez goles de aquí a que termine el mercado. Es difícil pero lo que quiero hacer goles para ganar partidos. Si meto cuarenta goles y subimos se puede contar conmigo".

De este modo, rehusó "pensar en historias". Lo que quiere es estar tan centrado como un ajedrecista en plena partida. "Estar motivado para dar mi mayor rendimiento aquí", añadió el futbolista que, por otro lado, aseveró que al equipo le "hacía falta una victoria fuera (no la lograba desde la segunda jornada), sobre todo para reivindicar el proyecto".

"Estamos en buena línea, sobre todo en casa, y el único pero que se le podía poner al equipo era que fuera de casa, donde no estábamos dando el nivel. El otro día hicimos un buen partido sobre todo en la primera parte", sentenció.

En otro orden de cosas, el Real Valladolid ha vuelto hoy a entrenarse con la única novedad de que Balenziaga no terminó el entrenamiento por precaución, debido a que arrastra una sobrecarga muscular, por lo que Felipe se sumó a la sesión con el primer equipo.