Recital de goles del San Viator y escasez del Rayo Simancas
A la tercera fue la vencida. El San Viator logró su primera victoria en esta temporada. Una victoria llena de goles, que hizo que las zamoranas del Amigos del Duero B no dejaran de sacar del centro del campo. Hasta un total de siete tantos anotaron las chicas que entrena Abel Gonzalo. No se puede decir lo mismo del Rayo Simancas, quien sacó un escaso empate a uno, a pesar de las ocasiones de las que dispuso el conjunto vallisoletano.
C.D. San Viator 7 C.D. Amigos del Duero B 1
Poco se intuía el abultado resultado durante la primera media hora de partido. Ni las locales, ni las zamoranas se hacían con el dominio de la pelota. Pero lo que empezó siendo un encuentro de balones largos, pasó a ser un recital azulón. La lata la abrió Cris, quien se escabulló entre la zaga del Amigos y se colocó frente a la portera. El más complicado fue el primero, ya que a partir de ahí vinieron todos los demás. En apenas dos minutos, Marina marcaba el 2-0 de un cabezazo. Segundo tiro a puerta, segundo gol.
Después le tocó el turno a Tamara, que anotó un hat trick. En su primero, la delantera cabeceó a la red un pase de Yoana desde la línea de fondo. En el segundo, la jugadora recogió un pase en profundidad de Saray y batió por alto a la portera, a quien había pillado a medio camino. Y en el último, aprovechó un balón perdido del que ni la defensa rival ni la portera se entendieron.
La gran actuación la finalizó Judith. La punta exprimió su mejor arma: la rapidez, para escaparse en la banda y cruzar el cuero al palo largo. Aún tendría tiempo para otro. El Amigos del Duero poco pudo hacer, más que conformarse con el gol del honor. El próximo sábado, el San Viator (ahora séptimo) viajará a Burgos para enfrentarse a la Arandina (octavo).
C.D. Casco Viejo 1 C.D. Rayo Simancas 1
Las simanquinas, que partieron a Burgos sabiendo que el partido que iban a disputar no sería nada fácil, se encontraron con numerosos problemas. Problemas, tanto en el juego, como fuera de él. En primer lugar, el encuentro comenzó con un retraso de más de 15 minutos porque el campo estaba ocupado. Según el técnico vallisoletano, Javier Martín, la espera fue innecesaria ya que el Casco Viejo disponía de otro campo de mejores condiciones libre. En cambio, las locales prefirieron jugar en el terreno que más se adapta a su juego: campo minúsculo y con baches. Algo que marcó el fútbol de ambos equipos.
Así, los espectadores pudieron ver un partido muy disputado, de mucha batalla y embarullado por momentos. La primera parte tuvo dominio burgalés, aunque las ocasiones fueron parecidas para unos y otros. La diferencia estuvo en que el Casco Viejo le puso más intensidad y garra, lo que hizo que a los 23 minutos se adelantara en el marcador.
Como ya viene ocurriendo en otros partidos, el Rayo Simancas despertó en la segunda mitad y provocó un continuo acoso a su rival. Los cambios más ofensivos- facilitaron el gol del empate, que vino de las botas de Pili. Pero cuando todo parecía de cara, las simanquinas se quedaron con una menos. Jenni, que arrolló a una rival, vio la roja directa.
A pesar de la inferioridad, el Rayo siguió dominando el encuentro y a punto estuvo de llevarse la victoria en un par de ocasiones, sin embargo, la efectividad no estaba de cara. Con este punto, las vallisoletanas se colocan en la quinta posición, aunque en la jornada que viene pueden bajar alguna más, ya que les toca descansar.
