Onésimo, el director de orquesta que cede el protagonismo a los "artistas"

A lo largo de los dieciséis minutos que duró su comparecencia, Onésimo dio pistas sobre la que va a ser su metodología, su estilo de juego y cómo va a plantear los partidos en función del adversario. Todo son incógnitas y el vallisoletano despejó hoy algunas. "Las sensaciones de estos primeros días son buenas y la implicación de la plantilla es extraordinaria. Yo no vengo a inventar nada, ellos son los protagonistas. Mi intención es que ellos plasmen las ideas con las que vengo, nada más", dijo.

¿Cuáles son esas ideas?. Al técnico no le importó detallar su libro de estilo. "Quiero que el equipo esté junto cuando no tiene el balón, que trabaje bien la línea de cuatro, que se defienda bien la pelota y que cuando la tengamos seamos capaces de manejarla bien. Tenemos jugadores talentosos para ello. Soy de los que piensa que en el fútbol no se puede estar siempre apretando, es mala señal porque significa que nunca tenemos el balón. Hay que saber cuándo apretar y cómo deben reaccionar la línea de cuatro y los dos medios centros cuando superan la primera línea de presión", explicó.

También avanzó a los "águilas rojas", como definió a los periodistas, que no existirán dificultades a la hora de descifrar las alineaciones de cada contienda durante las diferentes sesiones de entrenamiento, a excepción de la que sea a puerta cerrada. "No suelo esconder los onces. No me importa que se sepan. Tengo el boceto hecho, pero alguna duda puede surgir, el que no las tengas no es entrenador. Sobre las sesiones a puerta cerrada... No es un capricho. Os pido disculpas, pero es algo bueno que veo para el grupo y para matizar cosas", argumentó.

Hoy ha sido el primer día del candado echado, con Jesús Navarro controlando a los camuflados y a los sigilosos. Un entrenamiento en el que Onésimo ha preparado la estrategia y ha incidido en los remates a puerta. Aspectos táctico-técnicos que ha repasado de cara al choque ante el Valencia CF, un equipo "muy serio atrás, mientras que de medio campo hacia adelante posee futbolistas determinantes, rápidos y talentosos", matizó.

Por otro lado, Onésimo recalcó que es mejor olvidarse de los árbitros. "Me preocupa que no nos sepamos aislar. Fíjate en si no me equivoqué yo en mi época. Si entramos en estas guerras nos vamos a dispersar", apuntó.

Para finalizar, no obvió pronunciarse sobre el papel que desarrollarán con él los futbolistas del filial, a los que entrenaba hasta el pasado lunes. "Tenemos una plantilla extensa, pero lo considero oportuno en algún momento, hay gente preparada en todas las líneas para echarnos una mano", subrayó entre otras muchas cosas.

Con todo esto, es el momento de que se desaten las elucubraciones, de que las apuestas en torno al primer once y el esquema de juego empleado se sucedan por doquier. El tiempo se agotará el sábado a las 18,00 horas, con Mestalla como primer escenario. Allí, se podrá ver si la nueva sinfonía blanquivioleta empieza a sonar bien con las bajas por lesión de Sisi, Jacobo, Álvaro Rubio y Marcos, y la del angoleño Manucho, al estar sancionado tras su expulsión ante el Almería.