Las Palmas, del buen comienzo a puestos de descenso
Ángel Velasco
Un buen resumen y un título para definir a la Unión Deportiva Las Palmas sería calificar al equipo amarillo como El Real Valladolid 2.0. El conjunto canario empezó la temporada bien. Tenía rasgos que lo definían y los resultados le acompañaban, pero el paso del tiempo quitó fuerza al proyecto y terminó con el entrenador. Eso sí, el buen comienzo de campaña hizo de los jugadores de Paco Jémez la sensación de la Liga Adelante. Álvaro Cejudo, Jonathan Viera o Vitolo sonaban para equipos de Primera y es que las primeras jornadas disputadas fueron brillantes. El comienzo fue tan bueno que cuando llegaron al José Zorrilla en la octava jornada lo hacían como imbatidos. En Zorrilla perdieron el récord y empezaron a ver la vulnerabilidad en determinados puestos.
El paso de las jornadas no jugaba a favor de los canarios que partido tras partido empezaban a perder fuelle. Tanto es así que tras tocar en el mes de noviembre el ascenso ahora mismo se encuentran en puesto de descenso a Segunda B. Llegar a los puestos bajos de la clasificación costó el despido a Paco Jémez. El entrenador canario fue relegado de sus funciones hace dos jornadas tras una dolorosa derrota ante el Granada. El ex entrenador de Córdoba o Cartagena había perdido el rumbo del equipo y el vestuario no confiaba en él. Juan Manuel Rodríguez es el elegido para salvar de la quema a un equipo que ha ido de más a menos y de menos a casi nada.
Adelantar una venta para hacer caja
El fichaje de Álvaro Cejudo por Club Atlético Osasuna estaba cerrado para el próximo verano. El extremo diestro terminaba contrato con el equipo amarillo y firmó un precontrato con el club rojillo para la próxima campaña. Pese a tener todo atado Osasuna tuvo que negociar con Las Palmas al querer hacer el fichaje para el mercado invernal. La salida de Juanfran Torres al Atlético de Madrid dejaba a los pamplonicas sin opciones en la banda derecha y por ello decidieron adelantar la llegada del fichaje de verano. Las Palmas aceptaba la venta porque veía que de esa forma podía hacer caja con una venta que meses más tarde no supondría beneficio alguno. Así, todos contentos.
Con el dinero obtenido de la venta de Cejudo el equipo amarillo decidió reforzar puestos vulnerables. Hasta Gran Canaria llegaron Lequi, central ex del Atlético de Madrid y Celta de Vigo, y Borzani, ex del Almería. Con estos dos fichajes, más el de Quero por la grave lesión de Vitolo, el equipo cimentaba la parte de atrás del equipo con el objetivo de hacer de la defensa una virtud.
La experiencia es una virtud y más en un equipo joven
El objetivo principal de la Unión Deportiva Las Palmas es dejar la portería a cero. Ser seguros atrás y buscar contragolpes con una referencia arriba es la filosofía de un equipo con problemas y el equipo amarillo no lo es menos. Para llevar a cabo esta idea es necesario tener un delantero fuerte y fiable, y ellos lo tienen. Javi Guerrero es un seguro de vida. Si el ex del Racing de Santander tiene un día acertado los canarios solo deben trabajar defensivamente. De lo demás se ocupa el veterano punta.