El Rayo Simancas hace historia

El equipo de fútbol C.D. Rayo Simancas finalizó subcampeón de la Primera División Regional Femenina. Una posición a la que llega por primera vez, después de tres años de andadura en esta categoría. Las chicas a las que entrena Javier Martín alcanzaron un total de 51 puntos, justamente los mismos que ha sacado el C.D. Casco Viejo, el rival más directo de las simanquinas. Por encima de las vallisoletanas y de las burgalesas finalizó el C.D. P. Casa Social Católica, que con 70 puntos se adjudicó el campeonato y la plaza para jugar la próxima temporada en uno de los grupos que formarán la nueva Segunda División Femenina.

Buena parte del mérito del Rayo Simancas ha sido su continúa regularidad, más patente en los partidos de vuelta en los que únicamente se ha dejado 5 puntos (sufrió una derrota a domicilio frente a las líderes y un empate en casa con la Arandina). Los números finales del conjunto rayista fueron 16 victorias, 3 empates y 5 derrotas. Además, las chicas lograron anotar 49 goles y recibieron 22 tantos.

Según su técnico, el segundo puesto ha proporcionado a todos “una alegría enorme”. “A nivel de equipo era a lo máximo a lo que se podía llegar y tiene el valor añadido de que ha sido el mejor puesto que ha tenido el club en toda su historia”, comentó Martín. Asimismo, también se mostró muy agradecido con las chicas, quienes “han demostrado durante toda la temporada un esfuerzo y un sacrificio muy grande. Siempre han estado comprometidas, tanto las titulares como las suplentes, y esta plaza ha sido un premio justo, no a las individualidades, sino al trabajo de todo el equipo, añadió.

El subcampeonato además de ser un premio al trabajo y a la regularidad también podría traer una satisfacción mayor. Con la nueva regularización para la próxima campaña del fútbol femenino aún no se conoce con claridad qué número de equipos van a formar la Primera, Segunda y Tercera División. Y quizá pueda haber una plaza para el Rayo Simancas en la categoría de plata. “Nosotros queríamos llegar ahí y, después, ya se verá si suena la flauta” confesó Javier Martín.

Tres partidos “de infarto”

El Simancas no tuvo amarrada la segunda plaza hasta el final, ya que el Casco Viejo le mantuvo el pulso incluso en los minutos de descuento de la última jornada. “Los últimos tres partidos han sido de infarto, un acto de fe en el que hemos remontado in extremis un marcador en contra”, comentó su entrenador.

El último de ellos, contra el C.F. Palencia, quizá fue el más difícil de todos. A pesar de que las palentinas no se jugaban nada, plantaron cara desde el primer momento y demostraron que querían llevarse los 3 puntos de Los Pinos. Por su parte, las locales también salieron a por el encuentro. Entraron por bandas, buscaron la amplitud del campo y dispusieron de dos ocasiones de Vane, que no finalizaron en la red. Las visitantes, que también contaron con dos buenas oportunidades para estrenar el marcador en los primeros 45 minutos, crearon peligro y metieron alguna que otra duda al equipo rival.

En la segunda mitad, el Rayo Simancas comenzó más espeso, en cambio, el Palencia empezó a tocar el balón. Fruto de ello vino el 0-1. En el minuto 67, las palentinas botaron una falta desde medio del campo que fue a parar a la olla. Allí, entre tantas jugadoras que no atinaban a despejar, finalmente el cuero acabó dentro de la portería.

Para conservar el segundo puesto de la clasificación al Simancas solamente le valía la victoria. A partir del tanto en contra, Javier Martín colocó una defensa de tres. Los minutos transcurrían y el marcador no se movía así que  ya a la desesperada la zaga de las locales se quedó únicamente con dos personas.

El experimento puso las tablas en el marcador a falta de un minuto para que finalizaran los 45 reglamentarios. Sandrita batió a la guardameta con un potente tiro desde la frontal y el árbitro dio vida a las locales al añadir 5 minutos más, por todo el tiempo que se había perdido. En ese momento el partido ya estaba roto y cualquiera de los dos podía llevarse la victoria. El Palencia protagonizó una gran ocasión que se escapó por muy poco y Peque tuvo en sus botas el triunfo vallisoletano, pero la portera visitante despejó su tiro.

Finalmente, la última jugada trajo los tres puntos y la alegría del subcampeonato a las rayistas. Pili anotó el definitivo 2-1 al reventar un balón perdido dentro del área. Hasta junio no se sabrá si ese gol también ha traído alguna sorpresa más.

Con la liga ya concluida, el Rayo Simancas seguirá entrenando hasta finales de mayo, fecha en la que puede jugarse el segundo torneo femenino organizado por el club. Aunque aún está por fijar cuándo será el día exacto y los equipos que configurarán el trofeo.  

San Viator

El otro club vallisoletano que milita en la Primera Regional Femenina, el San Viator, terminó el campeonato en la mitad de la tabla, en concreto en la séptima posición con 34 puntos (10 victorias, el mismo número de derrotas y 4 empates). Su registro goleador fue de 55 tantos a favor y 41 en contra.