El dilema en la portería

Jacobo y Jimenez opositan al puesto y originan ese debate en la psique del técnico blanquivioleta, quien debe decidirse entre la veteranía del primero o en dar un voto de confianza al joven arquero, que presenta su candidatura al puesto con buenos informes de los preparadores interinos.

El día de su debut se vio estropeado por una injusta tarjeta roja, pero entonces demostró sus arrestos, la confianza que deposita en él mismo y en sus cualidades debajo del arco. Su juventud juega en contra de sus posibilidades, máxime en un partido como el del domingo, vital por la necesidad y a cara perro por la importancia del rival. No en vano, su descaro ya gustó a Abel.

El equipo afiló el cuchillo el pasado fin de semana con la victoria ante el Recreativo de Huelva en un partido épico en el que Justo Villar dejó el pabellón bien alto. Tenía la confianza de un técnico que, desde que llegó, se decantó por el paraguayo, cortando de golpe la titularidad que gozaba Jacobo. Un hándicap que juega en oposición de la veteranía del vallisoletano, del que se recuerdan pocas actuaciones estelares en la presente campaña.

Puede que este sábado sea el mismo Abel Resino el que ofrezca la decisión relativa a esta encrucijada en la rueda de prensa previa al duelo ante el Betis. Puede que no haya resuelto todavía el acertijo y haya que esperar a la alineación inicial el mismo domingo. Sea como fuere, los dos deberán hacerlo muy bien para que Abel Resino se plantee relegar al banco a Villar una vez se haya recuperado de su pubalgia.

A la ausencia del paraguayo podría unirse la de Sisi, quien todavía aqueja la contusión costal que se produjo en el choque ante el Recreativo, la cual le hace ser, de momento, duda. Javi Guerra, por su parte, se incorporó al trabajo colectivo.