Djukic sigue deshojando la margarita

"No tengo nada con nadie, excepto con mi mujer", bromeó el preparador serbio en la rueda de prensa previa al choque de este domingo ante el Celta de Vigo, la cual versó principalmente sobre su continuidad. No entró al trapo y reveló únicamente que no tiene tomada una decisión ni se ha atado con ningún equipo.

Sigue deshojando la margarita. O eso parece. "No voy a decir hasta el último partido lo que voy a hacer. Qué más da. Lo importante es lo que está haciendo el equipo, que son cosas extraordinarias. Las personas quedan o siguen. Lo mas importante es el club, que los jugadores están haciendo las cosas bien. El trabajo queda para siempre", comentó.

Djukic afirmó que "hay posibilidades" de que siga en el Real Valladolid y se congratuló de que el club le haya ofrecido la renovación. "Tanto ellos -el club- como yo lo hemos dado todo. Las dos partes podemos estar muy tranquilas", aseveró Djukic quien aclaró que está ayudando en toda la planificación de la próxima temporada y que los fichajes para la próxima temporada no dependen tanto de quién sea el que comande la nave.

"Elegirá a jugadores buenos en virtud de sus posibilidades. El club funciona por encima de entrenador. Yo puedo decir, fichamos cuatro serbios, y al cabo de tres meses, se me echa y que se hace con los cuatro serbios. El club debe tener una planificación", explicó el técnico, quien también despejó de puños y con algo de sorna cuando se le preguntó si mira de reojo a lo que ocurre en Valencia o en el Benfica (ABC publica este jueves el interés del conjunto luso por hacerse con sus servicios).

Para cerrar el tema de su continuidad, Djukic subrayó que en el caso de que abandone el Real Valladolid, no será porque considere que no puede mejorar lo realizado hasta la fecha. "No soy de los que dice que sabe que aquí no puede ir a mejor. No he tenido miedo a los retos. Nunca he llorado. He trabajado con lo que tengo. Estos jugadores han rendido muy bien y hemos podido sacar buen provecho de sus cualidades. Nunca he buscado excusas. Ni mucho menos. Aquí hay mucha margen de progresión. Tanto el club, como los jugadores", espetó.

Manifestaciones con las que concluyó la rueda de prensa que, obviamente, no fue un monográfico sobre su futuro más inmediato. También se refirió al partido del domingo ante el Celta de Vigo, aunque, en esta ocasión, no diseccionó las virtudes técnicas y tácticas del rival.

Anotó que no existe ningún ánimo de revancha por los partidos del año pasado ante el cuadro vigués en Segunda División e insistió en cumplir con la profesionalidad que se le presupone al conjunto blanquivioleta. "Nosotros tenemos que terminar nuestro trabajo como profesionales. No hay ninguna revancha, sino hacer nuestro trabajo, buscar la victoria en nuestra casa y poner nuestro club lo más alto posible, ya que es importante al entrar en el reparto de derechos televisivos en mejor posición. Hemos dado la cara todo el año y espero sigamos mostrando lo que somos y lo que hemos hecho", dijo.


En este sentido, indicó que se gestiona con normalidad las posibles suspicacias que pudiera levantar cualesquiera de los resultados que se den en el partido ante el Celta de Vigo, conjunto que llega a Valladolid con la taquicárdica necesidad de ganar para no ser equipo de Segunda.

"En estos dos años hemos ido a buscar la victoria siempre con dignidad. Sería entrar en el juego de lo que no queremos. Siempre hemos intentado predicar buscando la limpieza y honestidad en fútbol. Que mejor ejemplo que hacer los deberes en casa como un buen profesional y con la tranquilidad de que has hecho todo. Esta liga es muy larga. Todos quedamos donde merecemos. Nosotros queremos terminar con buenas sensaciones. No es lo mismo ir de vacaciones ganando que perdiendo. Es muy importante dar muy buena imagen por las sensaciones para el año que viene", concluyó el preparador del Real Valladolid.

En otro orden de cosas, la primera plantilla se ejercitó este jueves en los anexos al Estadio José Zorrilla con la única ausencia de Balenziaga, aquejado de una lesión grado I en el semitendinoso izquierdo que le hace ser duda para el partido de este domingo ante el Celta de Vigo. Rukavina y Guerra entrenaron con el grupo.