1-0: Ya hay motivos para la preocupación
Dos puntos de doce posibles, segunda derrota consecutiva y, lo que es peor, la sensación de falta de ideas. Ese es el Real Valladolid que cayó este sábado en Butarque frente a un Leganés recién ascendido y que ocupaba puestos de descenso. Sin embargo, el conjunto madrileño se llevó el premio a la constancia y, por el contrario, los de Rubi pagaron su falta de acierto y desajuste final.
Todo ello en un partido que arrancó eléctrico, con ocasiones por ambos lados en los primeros minutos. Dos internadas de los locales obligaron a Javi Varas a lucirse, antes de que una internada de Berdych se convirtiiera en un disparo vallisoletano, que la defensa del Leganés sacó en la misma línea de gol.
Pero si Varas era el protagonista en lo defensivo, Jefrén se convirtió el triste protagonista en lo ofensivo. El hispano-venezolano tuvo en sus botas el 0-1, tras un gran pase entre línea de Berdych, pero su disparo cruzado fue bien adivinado por Serantes. Minutos después de nuevo Jefrén se marchaba de los defensores pero su remate, ya sin ángulo, pegaba en el lateral de la red del conjunto madrileño.
En el segundo tiempo se esperaba un Real Valladolid con más mordientes, pero fue el Leganés quien fue creyendo en sus posibilidades a medida de que pasaban los minutos. Así, a los once de la reanudación Alvaro García obligó a la estirada de Varas, y el posterior remate de Eraso pegó en el poste cuando Butarque ya cantaba el gol.
Minutos después Berdych tuvo su gran oportunidad, pero tras superar a Serantes se quedó sin posibilidad de disparo, con la ayuda de un leve empujón del defensor. Pudo pitar penalti pero el colegiado canario no tenía ganas de complicarse el partido.
Y quien sí se lo complicó y de qué manera fue el conjunto de Rubi, cuando en el 73 de partido dejó que el ataque local descolocara a la defensa vallisoletana. y el posterior centro se convirtiera en el gol de Borja Lázaro. Un tanto que acabó de desenchufar al Valladolid, como ya ocurriera siete días antes frente a Las Palmas.
De hecho, estuvo más cerca el 2-0, primero con un remate que pegó en el palo y luego tras un grave fallo en el despeje de Varas, aunque el portero supo enmendar su error antes de que el balón entrara en la portería. Por el contrario, apenas hubo ocasiones claras de un Valladolid que ha entrado en barrena.