UVa, La ilusión ante la adversidad

Austeridad. Esa es la premisa ante una crisis económica que también afecta a otros deportes minoritarios como el baloncesto. Y más si hablamos de la categoría femenina, que no cuenta con demasiadas ayudas para poder seguir adelante y crecer en sus aspiraciones deportivas

En Valladolid existe el baloncesto femenino. La UVA milita en la Liga2, una categoría que ha sufrido mucho, pero la mayoría de los equipos se han puesto manos a la obra para buscar jugadoras jóvenes, cuyas ganas e ilusión son máximas. Entre esos equipos se encuentra la UVA femenino, que ha perdido jugadoras importantes con respecto al año pasado por motivos económicos, en unos casos, y personales, en otros, y que este año ha apostado por la juventud con el objetivos de mantener la categoría. Una tarea que se presenta complicada, ya que la plantilla necesitará tiempo para acoplarse. 

El 90% de ese plantel está formado por jugadoras de Valladolid, lo que deja constancia de que la ciudad tiene cantera de sobra. Entonces, lo único que falta para que haya un equipo femenino de elite es apostar por ello y que haya dinero sobre la mesa. La Universidad de momento, no puede aspirar a más, ya que solo cuenta con jugadoras amateur, al no poder permitirse firmar contratos profesionales. 

Al frente de este equipo está José Carlos Rojo, un técnico que lleva más de 30 años ligado al mundo del baloncesto y cuya filosofía se mantiene intacta, para enseñar a sus jugadoras a ser personas, lo primero,  y a amar un deporte como el baloncesto, después. Rojo cree que el equipo se tiene que hacer. “Se ha querido tener un equipo joven. Lo cual por un lado es bueno para unas cosas pero malo para otras ya que se ha perdido calidad y experiencia. Como no se puede fichar a nadie nos tenemos que quedar con gente de la casa, de la cantera”. 

La UVA Femenino atesora un futuro prometedor. En estos momentos disponen de categorías infantiles, cadetes y otros equipos de base. “Pero el salto de una jugadora júnior a la Liga2 es muy grande”, declaró el técnico. La Liga femenina cada año es más difícil y, en opinión del entrenador del conjunto vallisoletano, la temporada se presenta complicada. “La primera vez que estuvimos en esta categoría solo se ganó un partido, después se venció en alguno más y ya el año pasado se lograron muchas victorias. El problema es que nos hemos roto como equipo. Los demás han perdido efectivos por los problemas económicos. Habrá 5 o 6 equipos que lucharán por el ascenso y luego el resto pugnará por no bajar de categoría”. 

José Carlos Rojo siempre lanza este mensaje a sus jugadoras. “Que sigan con el baloncesto, porque te ayuda a ser mejor persona, te hace apoyarte en los demás, indica una filosofía de trabajo que, tal y como está la vida, es lo mejor que te puede pasar. Y mientras entrenas no piensas ni haces otras cosas”, reconoce. 

Por lo tanto, el deporte femenino existe en Valladolid. No solo está el masculino. Las jóvenes promesas del baloncesto tienen un sueño y una ilusión desde muy pequeñas: ser jugadoras profesionales y poder vivir de ello. Una canasta vale para ser feliz. Por eso, no van a van a perder las ganas y seguirán luchando cada día en los entrenamientos para que la ciudad, algún día, pueda contar con un equipo de baloncesto femenino en la elite.