Desde el otro lado del micrófono

Cuando alguien que ha pasado más de quince años en una institución como el CB Valladolid se pone delante de un micrófono, es imperativo escuchar. Y eso ha hecho Saúl Asensio, antiguo jede de prensa de la entidad morada, y ha mostrado su preocupación por el rumbo que deportivo que está siguiendo el equipo: “Es una situación complicada, con males muy profundos a todos los niveles. En cuanto a imagen, se está tocando fondo y no puede ser que en cada partido encajen 100 puntos”, resumía Asensio, quien explicaba la difícil situación que deben estar pasando los integrantes de la plantilla y del cuerpo técnico: “Seguro que hay muchas cosas que hacen que no vivan en el entorno ideal para desarrollar sus cualidades y que puedan dar el máximo de sus prestaciones”.

Por otro lado, Saúl se refería a otros sentimientos para exigir algo más al equipo, como “orgullo y respeto a la historia y sus colores. Ahí es donde hay margen de mejora porque a nivel de actitud, concentración y amor propio sí que se puede dar un salto adelante para competir”, reclamaba el vallisoletano. Además, el exjefe de prensa alababa la figura de Ricard Casas como un entrenador “excelente, un trabajador incansable” y del que no tiene dudas de que está haciendo “lo máximo posible”.

Estas declaraciones, realizadas en el programa Baloncesto A Fondo, en Onda Joven Radio, no se centraron sólo en el primer equipo. Saúl Asensio también relató los que han sido sus últimos meses en el CB Valladolid: “El desamparo y la incomprensión que se vivió en verano fue lo peor. Después, las personas que retomaron el control, Juan Vela y Felipe Martín se encontraron en una situación que era, bajo mi punto de vista, una huida hacia adelante, como tirar los dados en el casino”, resumía Saúl.

Respecto a su situación, le hubiera gustado que “se hubiese llevado de una manera menos impersonal, que las cosas se hubiesen hecho antes”. Además, el exjefe de prensa morado habló de Juan Vela como una persona a la que estar agradecida: “Sé que mi marcha es una espinita que tiene él clavada, los dos queríamos que siguiera. Nuestra relación es muy cordial, también en lo personal, pero probablemente si él hubiera podido agilizar las decisiones, yo hubiese continuado en el club, aunque quizá hubiera sido peor para ambas partes”, finalizaba Saúl Asensio.