De la Fuente en un partido anterior FOTO: Valladoliddeporte
Baloncesto | CBC Comercia ULSA
De la Fuente se disfraza de rey ante Agustinos Eras
8 de Enero de 2017
Los de Paco García firmaron los mejores primeros 15 minutos de la temporada, pero una serie de errores evitables permitió que los locales se marcharan con vida al descanso. Tras la reanudación, los leoneses redujeron las diferencias hasta los ocho puntos, momento en el que emergió la figura del capitán Sergio de la Fuente, quien anotó 12 puntos consecutivos para sentenciar el triunfo. Un regalo del rey Gaspar.
No puso las cosas fáciles Agustinos Eras para que las ardillas estrenasen su casillero en este 2017. Los de león registraron una buena entrada en el Palacio de los Deportes en el día en el que, además del aliciente del derbi castellanoleonés, también presentaron a todos sus equipos de la cantera delante de la afición, lo que significaba muchas gargantas para alentar a los mayores. Sin embargo, la parroquia pucelana no quiso perderse el partido y se desplazaron para apoyar a los suyos. Y vaya si lo hicieron, a pesar de estar en inferioridad numérica.
Tampoco acompañaban los elementos deportivos: Pablo Esteban era duda por fiebre, aunque finalmente disputó minutos, y Daniel Astilleros, quien sigue acusando problemas en su tobillo, finalmente no pudo aportar al equipo. Una rotación corta para medirse ante un renovado Agustinos Eras que cuenta con un buen fondo de armario. Ante tal tesitura, debían ser los titulares los encargados de dar el do de pecho. Y, al igual que los aficionados con su apoyo, vaya si lo hicieron también.
Sergio de la Fuente, el incombustible capitán, fue el encargado de inaugurar el marcador con un triple. Fue el preludio de lo que estaba por venir en este primer cuarto. El tiro del rey mago Gaspar abriría el festival de triples al que se sumaron Miguel González y Wade-Chatman y que obligaron a parar el partido al técnico local Ángel González Jareño. Los de Paco García dominaban el marcador 5-9 y todos los puntos habían llegado desde la larga distancia con un espectacular 75% (3/4) de acierto.
El tiempo muerto, sin embargo, no cambió la dinámica que imponía el Comercial Ulsa. Agustinos Eras pasó a zona 3-2 para tratar de parar la debacle, pero fue en vano. Paco García también movió ficha y plantó una tímida presión a todo el campo para desgastar a José Antonio Medina, principal amenaza local, y a quien defendió a la perfección Miguel González hasta que el vallisoletano se cargó de faltas. Con la principal arma de Agustinos Eras anulada y un Javier Lacunza fallón, las ardillas firmaron un parcial de 0-11 (5-14) que frenó Benjamin MIllaud con un triple. El primer cuarto finalizó 13-22 con un Henri Wade-Chatman con 7 puntos sin fallo y en racha para seguir haciendo daño a los locales.
Graham-Bell, también uno de los destacados por parte de las ardillas, fue el encargado de anotar la primera canasta de este segundo periodo con un lanzamiento en suspensión. El alero inglés dio un recital de mates y mostró su mejor versión en el tiro, desarbolando en todo momento la defensa de los locales, quienes, hasta ese momento, registraban un 2/11 en triples. La incapacidad anotadora de los leoneses dio pie a la máxima diferencia para los de Paco García y a un nuevo tiempo muerto del técnico local en busca de soluciones.
Tras recibir las instrucciones de su entrenador, Jack Crook se echó el equipo a la espalda y se hizo dueño de la pintura, con permiso de Graham-Bell, quien posterizó al pívot estadounidense con un tremendo mate llegando desde atrás precedido de un triple. El londinense estaba desatado y Agustinos Eras fue incapaz de contrarrestarle con defensa individual y mucho menos con una zona. El CBC Valladolid estaba firmando sus mejores minutos de la temporada, pero el público comenzó a apretar y se revirtió la situación.
De la brillantez de las ardillas se pasó a la precipitación en ataque y a una defensa que brillaba por su ausencia. Los últimos minutos de la primera mitad fueron para el olvido y, liderados por Javier Lacunta, acertado de cara al aro al fin, Agustinos Eras comenzó a reducir la brecha en el marcador. Los leoneses estaban vivos y llegaron al descanso 27-41, impulsados por los errores de las ardillas, después de Graham Bell concediera tres tiros libres a José Antonio Medina cuando el local lanzaba desde el medio del campo y sobre la bocina. Un error absolutamente innecesario que metió en el partido al cuadro de Ángel González Jareño. Quedaba mucha tela por cortar.
Los leoneses salieron muy motivados tras el paso por vestuarios, mientras que las dudas parecían atenazar a las ardillas. El público apretaba por momentos, sabedoras de la importancia de ganar el derbi castellanoleonés. Pero la primera canasta del cuarto fue un triple de Wade-Chatman para llamar a la calma y enfriar el ambiente. El americano estaba desatado y volvió a anotar tras una buena penetración. Su mejor partido como jugador del cuadro carmesí hasta el momento y aún quedaban minutos para seguir sumando a sus números.
Miguel González, con tres faltas personales, tuvo que dejar de defender a José Antonio Medina y el local comenzó a hacer acto de presencia después de llegar al descanso con solo 4 puntos, todos ellos desde la línea de personal. La defensa de la joven promesa vallisoletana había dado sus frutos pero ya no podía seguir con el emparejamiento. El base zurdo tomó la manija de los suyos y anotó desde la larga distancia para iniciar la remontada. Agustinos Eras comenzó a circular bien el balón y castigar las pérdidas de los hombres de Paco García, quienes vieron como la distancia se reducía a tan solo 10 puntos cuando restaban 15 minutos de partido.
Wade-Chatman, de nuevo, brilló cuando más lo necesitaban los suyos, a pesar de que llegó a estar defendido por dos hombres. Pero el base americano no solo mostró su faceta anotadora, sino también capacidad para asistir y beneficiarse de la situación. Un triple suyo devolvió al Comercial Ulsa los 10 puntos de diferencia después de que los locales llegaran a encontrarse 8 abajo en el marcador y posesión. El tercer cuarto terminó 44-54, con todo por decidir en el asalto definitivo y un Agustinos Eras más vivos que nunca.
El Palacio de los Deportes era una olla de presión y la pelota quemaba. Pero en esas situaciones críticas, son los valientes los que ganan partidos. Y no podía ser otro que Sergio de la Fuente. El capitán vallisoletano marca las diferencias en esta liga y ya lo demostró ante Xuven Cambados con aquel triplazo para sentenciar un trabajado triunfo. En León, su figura se alargó de nuevo para erigirse como el rey del derbi unos días después de desfilar en la tradicional cabalgata de los Reyes Magos.
La diferencia entre ambos conjuntos rondaba los 10 puntos y se intercambiaban canastas en ambos aros, pero ni los locales eran capaces de bajar de ahí, ni los visitantes de despegarse de forma definitiva en el marcador. Hasta que apareció Sergio de la Fuente, que hasta ese momento estaba lejos de los números que suele registrar jornada tras jornada.
El capitán comenzó su recital con una canasta marca de la casa: finta de tiro y hasta la cocina. Dos puntos más para el casillero y a defender. Y atrás, en la pintura, Mukendi y Sidibe se autoproclamaron escuderos de De la Fuente y comenzaron a taponar tiros y a intimidar los rivales. La pintura era de color carmesí gracias al poderío de los dos jugadores africanos. Mientras tanto, Sergio seguía sumando en el aro rival.
10 puntos consecutivos anotó el vallisoletano de adopción, que incluso forzó dos faltas antideportivas en el cuarto, a pesar de llevar varios minutos en pista con tres personales. Paco García asumió el riesgo y De la Fuente respondió con mente fría y nervios de acero. Quedaban cuatro minutos de encuentro y los locales se encontraban 9 abajo, con una intensa presión a toda cancha y problemas para subir la bola en los visitantes. El partido estaba en su clímax.
Pero la cabalgata llegaba a su fin. Sergio de la Fuente siguió con su particular desfile militar y alcanzó los 14 puntos en el último cuarto. Una barbaridad ante la que sucumbió Agustinos Eras. Graham-Bell interceptó un pase de José Antonio Medina y culminó el contraataque con un estratosférico mate de espaldas. El público enmudeció y el técnico local pidió un tiempo muerto desesperado para obrar la machada.
Los leoneses probaron con un quinteto pequeño y solo una única referencia interior para tratar de anotar de tres. Pero no fue posible. Las pérdidas de Agustinos Eras se fueron sucediendo y la brecha comenzó a aumentar de nuevo gracias al acierto de un Wade-Chatman que se fue hasta los 23 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias (28 de valoración), firmando su mejor partido desde que llegó al club. El Comercial Ulsa se consiguió una renta final de 20 puntos que no hicieron justicia con la igualdad que se vivió en el último asalto, que bajó el telón (64-54) a un bonito derbi castellanoleonés que decidió el Rey Mago Sergio de la Fuente.