80-66: Lógica derrota en Coruña
Lógica derrota del UEMC Real Valladolid Baloncesto en la cancha del Leyma Coruña. Los vallisoletanos cedieron en la cancha del líder, pero dando la cara a pesar de las bajas y los problemas físicos de las últimas semanas. Sin bajar los brazos y compitiendo, el cuadro de Paco García completó una buena primera mitad y partido en líneas generales, sujetando la anotación de los herculinos y manteniendo el choque con un tanteo bajo, aunque volvieron a sumar una nueva incidencia médica después de que Ziggy, al minuto de juego, recibiese un golpe en el hombro y se retirase al banquillo para no volver de nuevo a la pista.
Leyma Coruña y UEMC RVB, así, abrieron la contienda con un ritmo frenético, aunque sin acierto, y malas noticias para el Pucela a las primeras de cambio. Si ya de por sí llegaban los de Paco García en cuadro y con varios jugadores entre algodones, Ziggy entre ellos, un golpe en el hombro que recibió el lituano lo mandó al banquillo solamente minuto y medio después de que se lanzase la bola al aire. Juan Lambás, el canterano, a pista. Y la demostración de que, ante cualquier duda, ningún riesgo. Tocaba guardar la ropa y esperar que no revistiese gravedad.
Y bajo la batuta del ‘1’ los visitantes tuvieron bajo su control el cuarto casi hasta el final. Con un tanteo bajo, muy bajo, y alternativas, el UEMC RVB cumplió a la perfección con el guion durante cerca de siete minutos (10-11), pero las ardillas perdieron el orden en los últimos tres y Leyma Coruña golpeó. Un parcial de 8-0 disparó la ventaja y la anotación para que los de Diego Epifanio se apuntasen el primer asalto (20-13).
Llegaba la primera dificultad del choque y los de Paco García la atajaron a la perfección. El UEMC RVB impidió que los herculinos abrieran brecha con una gran salida en el segundo acto. Lucas N’Guessan se agigantó bajo el aro y sumó cinco puntos seguidos para los visitantes, cuya manija ahora llevaba Jaan Puidet, repartiendo minutos y la responsabilidad de la dirección pucelana (22-18).
Era un buen día para probaturas, para tratar de confundir al Leyma Coruña y el técnico vallisoletano optó porque Nwogbo y N’Guessan compartieran cancha, amén de plantar una defensa zonal que colapsó a los gallegos durante varias posesiones. Sin puntería los de Diego Epifanio, el Pucela estaba limitando los errores a la perfección… hasta que llegaron de nuevo unos minutos de desconcierto.
Y los coruñeses no perdonan uno. El mejor ataque de la competición lo es por algo y en un visto y no visto, tras varias pérdidas y después de abrir la lata en el triple (1/8 tras siete fallos), el conjunto local se volvió a escapar (30-23). Cogiendo velocidad conforme avanzaba el choque, los de Riazor subieron revoluciones y alcanzaron el descanso con 13 tantos de ventaja a pesar del tanteo tan bajo (37-24).
Derrota sin bajar los brazos
Sin puntería en el triple para ambos conjuntos (1/11 los dos), costaba sumar y anotar en los dos lados de la cancha, pero en esa faceta precisamente destacan los locales y pasito a pasito fueron distanciándose. El UEMC RVB regresó sin acierto, sufriendo ante el nivel físico de los coruñeses y éstos, dispuestos a romper el partido cuanto antes, mostraron una marcha más.
También sustentados en la lógica de contar con más efectivos, gasolina y energía que sirvió para poner tierra de por medio paulatinamente. Rondando ventajas cercanas a los 15 puntos, los visitantes se fueron animando ofensivamente (pero dejándose muchos tiros libres por el camino), aunque siempre a remolque y sufriendo para mantener el pulso que proponían los de Diego Epifanio. Éste, a falta de 10 minutos por disputarse, tenía mucho color naranja (63-43).
Con buena actitud y sin bajar los brazos, una nueva serie de canastas consecutivas de Lucas N’Guessan mantuvo relativamente cerca a los castellanos, aunque la bandera blanca empezaba a vislumbrarse en ambos banquillos. Ni Leyma Coruña hizo sangre ni el UEMC RVB se desfondó para tratar de obrar una machada épica, aceptando de buen grado un intercambio de canastas que mantuvo intacta la renta herculina (70-50). Un buen estirón final y triple casi sobre la bocina de Juan García-Abril cerró el encuentro por 80-66 y puso fin a una lógica pero competida derrota de las ardillas en la cancha del líder.
El UEMC Real Valladolid Baloncesto encara ya las últimas cuatro jornadas ligueras y en su próximo compromiso recibirá al Grupo Ureta Tizona Burgos el sábado 20 de abril, no del 90, en el Polideportivo Pisuerga.
• Ficha técnica:
80 – Leyma Coruña: Sebastian Aris (4), Olle Lundqvist (10), Yunio Barrueta (12), Alejandro Galán (7), Goran Huskic (4) -quinteto inicial-. También jugaron: Ingus Jakovics (4), Atoumane Diagne (10), Pablo Hernández (8), Aleix Font (7), Sean McDonnell (2), Alejandro Hernández (2) y Beka Burjanadze (10).
66 – UEMC Real Valladolid Baloncesto: Martynas Zigmantavicius (0), Maj Kovacevic (14), Romaric Belemene (7), Sergio de la Fuente (2), Lotanna Nwogbo (16) -quinteto inicial-. También jugaron: Juan Lambás (0), Martynas Zigmantavicius (2), Juan García-Abril (7), Jaan Puidet (1), Lucas N’Guessan (15), Herve Kabasele (4) y Jaime Fernández (0).
Parciales: 20-13, 17-11, 26-19 y 17-23 (80-66 final).
Árbitros: López Herrada, Quintas Álvarez y Adán Rodríguez.
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima jornada de la liga LEB Oro, disputado en el Palacio de los Deportes de Riazor el domingo 14 de abril de 2024.