Baloncesto | MyWigo Valladolid
79-66: Misión imposible
5 de Diciembre de 2014
Complicado en circunstancias normales, difícil (o imposible) con los atenuantes actuales. Si a una plantilla corta le restas puntales diferenciales, Montañez en la anotación y el liderazgo y De La Fuente en el rebote, la empresa se convierte en una quimera. Eso sucedió ante Melilla y el MyWigo Valladolid se lleva a casa una derrota que puede enjuagar en unos días en casa ante Palencia.
Igualado inicio de encuentro, no obstante, e el Javier Imbroda, con un MyWigo Valladolid que alargaba las rotaciones y los ataques para evitar en lo posible el cansancio. Mientras, en Melilla iban apareciendo los jugadores más decisivos y reconocibles, como Tsiaras, Gatell o Butterfield. De hecho, el primer cuarto estuvo ciertamente parejo, sin un claro dominador. Pero fue el segundo periodo el que desató las hostilidades, especialmente de parte de los de la ciudad autónoma.
El ya mencionado Butterfield comenzó a anotar desde fuera, bien secundado por el trabajo interior de Gatell, Tsiaras y Laso, que acumulaban rebotes por doquier. Del lado morado, Pino continuaba su crecimiento individual y Uriz demostraba por qué es uno de los mejores bases de la liga. Pero, aparte de eso, poco más. El rebote era una asignatura demasiado complicada para que los de Porfirio Fisac pudieran aprobarla y la reválida de la defensa no podía contra la altura y rotación melillense.
Aún así, dos triples consecutivos de Rakocevic acercaron al MyWigo Valladolid en el marcador (36-30), pero un nuevo arreón de los de Alejandro Alcoba llevó el resultado a un peligroso 48-35 al final de la primera parte. El nuevo periodo que se iniciaba no iba a ser mucho mejor. Si bien el parcial no fue extremadamente negativo, la sensación de imposibilidad se adueñaba de los pucelanos y la profundidad de Melilla hacía mella, poco a poco, muesca a muesca, en el físico y las intenciones de los amarillos. Ni algún empujón arbitral, como una antideportiva de Butterfield sobre Iván Martínez y una técnica de Tsiaras lograron imprimir una marcha más a un equipo que, sencillamente, carecía de ella en este encuentro. Eso sí, los de Porfi Fisac conseguían mantener la renta por debajo de los veinte puntos, aspecto que hubiera rendido sus esperanzas mucho más pronto.
Encomendados a reducir las distancias desde el triple, el MyWigo Valladolid fue un quiero y no puedo en los instantes finales del partido. Ni Rakocevic veía el aro y sólo la tripleta Uriz, Pino e Iván Martínez aportaban réditos mesurables. La apuesta que prometió Fisac antes del partido, en la que aventuraba minutos para hombres como Astilleros, Arranz o Pape no se vio cumplida y la rotación pucelana no se fue más allá de los seis jugadores, sumando entre ellos una buena minutada. Finalmente, resultado previsible, negativo en algunos aspectos, pero que fue la consecuencia de la lógica más aplastante, ya que la rotación de uno y otro equipo no es equiparable y MyWigo Valladolid, además de su corta plantilla, tenía bajas demasiado importantes.
La batalla del rebote, sin Sergio de la Fuente, fue demasiado desigual, y lo ajustado de la rotación hizo que los minutos decisivos los jugadores estuvieran demasiado fundidos. Así y todo, conclusiones positivas, como el paso delante de Pino en el liderazgo, de Iván Martínez en la dirección y la consolidación definitiva, si no lo había hecho ya, de Mikel Uriz dentro de la élite de bases de la LEB Oro.
FICHA TÉCNICA
79 - Melilla Baloncesto: Eric Sánchez (2), Bravo (14), Wright (6), Butterfield (21), Tsiaras (10) cinco inicial Gatell (13), Almazan (2), Laso (8), Garrido (3)
66 - MyWigo Valladolid: Uriz (9), Iván Martínez (17), Pino (12), Lucas (0), Edmond (-) cinco inicial Pape (-), Arranz (-), Astilleros (-), Stobart (2), Rakocevic (16)
Árbitros: Juan Gabriel Carpallo y Mariano Palomo
Incidencias: Partido correspondiente a la undécima jornada de la LEB Oro entre Melilla Baloncesto y MyWigo Valladolid disputado en el Polideportivo Javier Imbroda de Melilla ante menos de 500 espectadores.