Sergio de la Fuente volvió a ser el mejor de su equipo. FOTO: Andrés Domingo
Sergio de la Fuente volvió a ser el mejor de su equipo. FOTO: Andrés Domingo
Sergio de la Fuente volvió a ser el mejor de su equipo. FOTO: Andrés Domingo
Stobart deja una bandeja fácil en la canasta. FOTO: Andrés Domingo
Canasta de Daniel Astilleros contra tablero. FOTO: Andrés Domingo
Piña al final del partido con todos los jugadores. FOTO: Andrés Domingo
Baloncesto  |  MyWigo Valladolid

67-65: Con el corazón en un puño

16 de Noviembre de 2014
Escrito por
Alex Arenas
Como ya sucediera ante Clínicas Rincón, el MyWigo Valladolid vio como dos balones surcaron el aire de Pisuerga con la mala intención de arrebatarles una victoria que habían trabajado a lo largo de los cuarenta minutos. Pero salió cara, como frente a los malagueños, y los morados sellaron la sexta victoria del curso, lo que los sitúa en el liderato virtual de la LEB Oro.


Pero el inicio del duelo no comenzó de buena manera. Ambos equipos acumulaban fallos, errores en el tiro y en el pase. Este festival de pérdidas dio como resultado un marcador bajo al finalizar la primera parte, pero ya se vislumbraba una actuación mastodóntica de un jugador, Sergio de la Fuente, que acumuló hasta diez rebotes al descanso, aderezados con 12 puntos de garra, buen juego y trabajo.


Además del buen hacer del ala-pívot vallisoletano, Jonathan Arranz y Daniel Astilleros comenzaron a producir en el juego de MyWigo Valladolid, tanto con defensa como con aspectos ofensivos. Los canteranos recibieron un espaldarazo de confianza en Pisuerga que, seguro, sumarán enteros dentro de la rotación de Porfi Fisac en el futuro.
Al llegar al final de los primeros veinte minutos de encuentro, la sensación de tanteo bajo no ocultaba el juego bien planteado de los dos equipos y la convicción de que, quien quisiera llevarse el choque, tendría que sufrir y trabajar hasta la extenuación, como se evidenció posteriormente.


Trece puntos de renta, remontados desde el triple


Tras el paso por vestuarios, el MyWigo Valladolid salió con una actitud defensiva sobresaliente y un juego en ataque que propició una ventaja muy seria. Fueron trece los puntos que alcanzó el grupo morado gracias al omnipresente De la Fuente, Uriz y los triples de Rakocevic. Pero, como diría Porfi, esto es la LEB y cualquiera puede ganar a cualquiera. Y así lo demostró. Gracias a dos triples de Lasa y a uno de Creus endosaron un parcial de 0-9 que eliminó cualquier atisbo de tranquilidad para los de Porfirio Fisac.


Con un partido nuevo al inicio del último cuarto (54-50), los diez minutos decisivos prometían tensión a raudales. Y así sucedió, porque Oviedo se puso por delante en el marcador pero Uriz, con un triple, volvía a poner arriba a los suyos a menos de cinco minutos de la conclusión. Ese intercambio de puntos y de ataques desembocó en una situación ajustada que desequilibró Sergi Pino con dos triples consecutivos, uno desde cada esquina, que daban aire al MyWigo Valladolid, pero no la bocanada definitiva.


Y es que el último minuto final de partido fue no apto para cardíacos. Los tiros libres fallados por Sergio de la Fuente, con su equipo uno arriba, dejaba en franquicia la posible victoria para Oviedo, quien dispuso de un triple de Neghbour y una canasta de dos del abulense Álvaro Muñoz. Pero sendos fallos, y el rebote defensivo de Uriz, dejaron el triunfo en Pisuerga, que se abona a tener el corazón en un puño en cada encuentro.


FICHA TÉCNICA


67 – MyWigo Valladolid: Uriz (14), Montañez (2), Iván Martínez (4), Lucas (1), Stobart ( 5) – cinco inicial – Pino (10), Arranz (6), Astilleros (2), De La Fuente (15), Rakocevic (9)


65 – Baloncesto Oviedo: Bassas (4), Lasa (14), Muñoz (6), Levesque (7), Tresnak (14) – cinco inicial – Sánchez (-), Creus (9), Víctor Pérez (8), Neighbour (1), Schreiber (2)


Árbitros: Alberto Sánchez y Juan Alberto Pinela. 


Incidencias: Partido correspondiente a la octava jornada de la liga LEB Oro entre MyWigo Valladolid y Baloncesto Oviedo disputado en el Pabellón Pisuerga ante 1.000 espectadores. Antes del encuentro se guardó un minuto de silencia en memoria de Alicia Fernández, jugadora del Benidorm, fallecida a la edad de 16 años durante un partido de baloncesto.