FOTOS: Mariano González
Rugby  |  VRAC Quesos Entrepinares
Emoción hasta el final en una partido de entrega absoluta por parte de los dos equipos

100 minutos le costó al VRAC proclamarse, por octava vez, campeones de la Copa Ibérica

12 de Abril de 2025

El VRAC Quesos Entrepinares volvió a escribir una página dorada en la historia del rugby ibérico al imponerse con autoridad al Belenenses portugués y levantar su octava Copa Ibérica. El conjunto vallisoletano demostró desde el primer minuto por qué es uno de los clubes más laureados del panorama nacional e internacional.

El partido no pudo comenzar de mejor manera para los queseros. Con el primer balón en juego, Martiniano Cian firmó una jugada rapidísima que encendió la grada. El zaguero del VRAC aprovechó un resquicio en la defensa lusa para lanzar una carrera explosiva que desarmó por completo al equipo rival. Cruzó el campo de lado a lado y posó el oval bajo palos, inaugurando el marcador de forma espectacular y dejando claro que el título no se iba a escapar: 5-0.
Sin embargo, el conjunto luso no tardó en reaccionar. Lejos de descomponerse, el Belenenses se hizo con la posesión y buscó el empate con paciencia y empuje. En una jugada de manual desde cinco metros, Domínguez culminó un potente maul que arrastró a toda la defensa quesera hasta la zona de marca. Menses no falló la transformación y devolvió las tablas al electrónico: 5-7.

La respuesta del VRAC fue inmediata. Balta Taibo, con carácter y precisión, castigó la indisciplina portuguesa con un golpe de castigo que volvió a poner a los suyos por delante: 8-7, en un duelo vibrante y sin tregua.
El ritmo no decayó. El partido se convirtió en un intercambio de golpes de alto nivel, pero fue el VRAC quien volvió a inclinar la balanza a su favor gracias al dinamismo de su línea de tres cuartos. Con el balón vivo y moviéndose con fluidez, los vallisoletanos encontraron superioridad por el ala. A la carrera, y tras una gran asistencia de Hollisworth, Fran del Pino finalizó la jugada con una marca que desató la euforia en la afición quesera. Taibo, una vez más, no perdonó con el pie, y el marcador se estiró hasta el 15-7.

El Belenenses seguía vivo y aprovechó un momento de indisciplina del VRAC para recortar distancias. Meneres, con seguridad frente a palos, sumó tres puntos que acercaban nuevamente al conjunto portugués: 15-13.

Pero los queseros respondieron con contundencia y autoridad. A ocho minutos del descanso, el maul se convirtió en un arma letal. La primera línea azulona impactó con fuerza sobre la defensa lusa y, tras una gran plataforma de empuje, Álex Pérez encontró el hueco para posar el oval. Taibo, impecable desde el tee, volvió a sumar de dos y elevó el marcador al 20-13, cerrando una primera mitad en la que el VRAC impuso su estilo, su físico y su ambición.

La segunda mitad arrancó con dificultades para el VRAC. Una temprana indisciplina en campo propio fue bien aprovechada por Meneres, que no perdonó a palos y recortó la diferencia: 20-16. Los de Diego Merino comenzaron a sufrir ante una versión más agresiva y decidida del Belenenses. En una jugada bien elaborada por la línea portuguesa, los lisboetas encontraron superioridad en un tres contra dos. Pese a los buenos placajes defensivos del VRAC, el conjunto visitante logró desequilibrar en el uno contra uno y posar una nueva marca que, con la transformación de Meneres, daba la vuelta al marcador: 20-23.

El golpe obligó al VRAC a reaccionar. Los vallisoletanos intentaron imprimir velocidad a su juego y buscaron espacios por fuera, pero la defensa de Os Belenenses se mostró firme, disciplinada y muy organizada. La precipitación y las indisciplinas comenzaron a pasar factura a los queseros. Meneres, infalible desde el pie, aprovechó una nueva oportunidad a quince minutos del final para estirar la ventaja hasta el 22-26.

Y aún quedaba más. El Belenenses, crecido y con confianza, mantuvo la ofensiva, obligando al VRAC a defender en su propio campo. Con el cronómetro en contra y la presión aumentando, otra infracción quesera permitió al pateador luso sumar tres puntos más con un lanzamiento certero: 22-29.

Con la última jugada y la bocina sonando, el VRAC hizo valer su raza y, tras más de seis fases seguidas y un férreo pick and go, el valenciano Marc Sánchez firmó la épica y llevó el partido a la prórroga.

En el tiempo extra, el VRAC tomó la iniciativa. Dispuso de dos oportunidades claras: un golpe de castigo fallado por Taibo y un posible ensayo tras una brillante jugada de la línea. A pesar del cansancio, los vallisoletanos seguían encontrando juego en su tres cuartos. Jerry Surumi llevó el oval hasta la cocina y adelantó al conjunto pucelano, con una transformación certera de Taibo: 36-29.

Cuando el VRAC parecía tener el control, llegó una inesperada jugada lisboeta. Acevedo, aprovechando la vuelta de Meneres al campo, devolvió las tablas al marcador: 36-36. Os Belenenses seguían exprimiendo el tiempo y era de nuevo Meneres quien adelantaba a los lusos con un nuevo golpe: 36-39.

Pocos minutos después, con el VRAC lanzado al ataque y tras varias fases sobre la veintidós rival, Balta Taibo quebró la defensa portuguesa y ensayó con contundencia. Él mismo convirtió para sellar el definitivo 43-39 y desatar la locura en Pepe Rojo.

Alineaciones: 

VRAC Quesos Entrepinares
Titulares: Marcos Muñiz, Pablo Miejimolle, Giorgi Turabelizde, Kalokalo Gavidi, Álex Pérez, Arnau Ojeda, Álex Saleta, East Timor Vilimeanu, Gonzalo Domínguez, Sam Hollingsworth, Martiniano Cian, Fran del Pino, Álex Alonso, Miguel Lainz, Baltazar Taibo.
Suplentes: Raúl Calzón, Álvaro Pírez, Mauro Genco, Manu Pérez, Marc Sánchez, Gabriel Vélez, Jerry Surumi, Pedro de la Lastra.

Belenenses
Titulares: Lucas Bordigoni, Guillermo Lawrie, Joaco Domínguez, Rafael Simões, Salvador Cunha, André Cunha, Manuel Pinto, Tomás Sequeira (c), Duarte Azevedo, Francisco Menéres, Lourenço Pedras, Owen Jenkins, Alex Thrupp, Francisco Galveias, José Santos.
Suplentes: Bernado Veiga, Miguel Nunes, Manuel Worm, Manuel Lima, Frederico Simões, David Wallis, Francisco Macedo, Gonçalo Santos.