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Voleibol  |  Copa de España 2025
Lo que era la “fiesta del voleibol” pasa a ser un acontecimiento de pago para participantes en la Copa de España y público en general

Valladolid presenta la Copa de voleibol con “medias verdades”

19 de Diciembre de 2025
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Escrito por
Mariano Gonzalez

El Ayuntamiento de Valladolid presentó la Copa de España de voleibol, que se disputará en Valladolid del 27 al 30 de diciembre. Un evento que reunirá a 208 equipos de categoría alevín e infantil, con cerca de 2.000 participantes.
Sin embargo, esta competición llega con algunas sombras que conviene intentar aclarar. La primera es que se anunció que el torneo era para las categorías benjamín, alevín e infantil. Sin embargo, en la convocatoria y en la propia presentación no se nombró en ningún momento el motivo de la ausencia de esa tercera categoría. La razón es que solo fueron 4 los equipos que formalizaron su inscripción, a los que se les ofreció el competir en alevín, una categoría superior, o la devolución del dinero.
Una posible explicación a esa importante ausencia de los equipos que más familiares arrastran tradicionalmente a este torneo es el aumento en el importe de la inscripción de la Copa. En 2024 los clubes debían abonar 240 euros por equipo, más el seguro de cada jugador. Este año el precio ha subido hasta los 350 euros, lo que unido al gasto de desplazamiento, alojamiento y manutención ha hecho que muchas familias vieran inviable asistir a la Copa.
Otro dato que no se desveló, o se contó como “media verdad”, es que el número de equipos ha disminuido con respecto a los últimos años. De hecho, es la primera edición en la que Valladolid baja en el número de participantes. La tendencia de crecimiento se ha visto frenada y la razón vuelve a ser el aspecto económico.  
Era reducción ha encendido las alarmas del sector de los hoteles, que colaboran directamente con la Copa de España como contraprestación al beneficio que sacan por el alojamiento de familiares y amigos.
Y es que conviene recordar ahora que esta Copa de España surge de un convenio firmado directamente entre el Ayuntamiento de Valladolid y la Real Federación Española de Voleibol. Un acuerdo a cuatro años visto, donde la Fundación Municipal de Deportes, aporta la cantidad máxima de permitida de 18.000 euros, donde el Ayuntamiento, a través de Turismo, amplia considerablemente esa aportación, y donde los hoteles también ponen su granito de arena.
En ese convenio, no explicado en la presentación, se afirma que el número de equipos debía ser de 250 o superior, algo que en esta edición de 2025 no se produce. 
Otro cambio en esta Copa de España con respecto a ediciones anteriores es que ya no habrá All Star y se sustituye por la Supercopa de España masculina. Una buena noticia si tenemos en cuenta que el día 29 estarán en Valladolid los dos mejores conjuntos de la pasada campaña, Guaguas Las Palmas y Grupo Herce Soria, pero que lleva como secreto no desvelado en la presentación que, en esta ocasión, el partido será de pago para los aficionados y también para los jugadores que participan en la Copa de España. Años atrás el encuentro era la “fiesta de voleibol” y el reclamo perfecto para poner en valor este deporte en Valladolid, ante los espectadores de televisión y también con los miles de niños participantes del torneo navideño.
En esta ocasión se antepone el afán recaudatorio en detrimento de que el pabellón Pisuerga pueda presentar un aspecto más desangelado. Recordamos que las entradas van entre los 6 y los 10 euros, y no te garantizan un asiento sino una zona del pabellón. 
Por último, conviene recordar también que la Copa de España es un evento nacional, organizado por la Real Federación Española. Eso se traduce en que el dinero de las inscripciones, del convenio con el ayuntamiento o las entradas a la Supercopa va al ente federativo. Desde este año la Federación de Voleibol de Castilla y León es una “entidad contratada” por su propia federación, a la que se le paga por los servicios prestados. Es una nueva política, que para unos estará bien y para otros estará mal, pero que tuvo su reflejo en la propia presentación donde el presidente autonómico, Jesús Soria, estuvo pero no habló.