Rugby | SilverStorm El Salvador
26-19: Derrota que sabe a victoria
18 de Diciembre de 2016
Comenzó adelantándose en el marcador el equipo italiano, con un ensayo por el flanco izquierdo del ataque que no conseguirían transformar, cuando apenas habían transcurrido cinco minutos desde el arranque del encuentro. Pero, lejos de amilanarse por la marca recibida en los primeros compases del encuentro, SilverStorm El Salvador se puso a la tarea para demostrar a los italianos que no iban a tenerlo tan fácil como cabría haber supuesto.
Ya mediado el primer tiempo la espesa niebla en el Peroni Stadium se estaba convirtiendo en un contratiempo, aunque parecía darle igual a los jugadores de ambos bandos. En especial a los de un SilverStorm El Salvador que consiguieron evitar la práctica totalidad de errores que se habían cometido en otros encuentros, forzando a que fuese en esta ocasión Patarò Calvisano quien se viese obligado a cometer indisciplinas que terminaban en golpe de castigo para el equipo español.
Hasta en 4 ocasiones señalaba el escocés Wells infracción del equipo lombardo, una de ellas desde casi 5 metros dentro del campo chamizo, que marraba Hansie Graaff. No ocurriría así con las 3 siguientes, que el apertura sudafricano pasaba entre palos en los minutos 19, 25 y 28, colocando en ventaja a SilverStorm El Salvador 5-9 en ese momento. Además, el juego de los colegiales estaba siendo por momentos uno de los mejores de la temporada, tuteando por completo a los transalpinos.
Sin embargo, la potencia italiana se mostraba en los últimos minutos, cuando conseguían imponer la potencia de su delantera tras una jugada de varias fases muy cercanas a la línea de ensayo, recobrando la ventaja en el marcador con un ensayo transformado en el minuto 32. Volverían los italianos a conseguir el premio en el minuto 38, colocándose en ese momento 19-9 en el marcador, tras los dos extra conseguidos por su apertura.
Gran imagen colegial
Pero SilverStorm El Salvador no se iba a dar por vencido tan fácilmente. Así, en una jugada llena de pundonor, Leandro Wozniak avanzó bastantes metros, cediendo el oval para Johny Carter en las cercanías de la 22 rival, y desde esa distancia consiguió el ensayo que llevó el delirio a los aficionados españoles congregados en el Peroni Stadium, y que dejaba el marcador en un 19-16 muy abierto para el segundo tiempo.
En el minuto 50 conseguían de nuevo puntos los vallisoletanos, con otra certera patada de Hansie Graaff, que colocaba el 26-19 en el electrónico italiano, después de que el segundo tiempo hubiera arrancado por un ensayo local. A partir de ahí, carrusel de cambios en los dos equipos, pero sin que se diera merma en el rendimiento de ninguno de ellos en absoluto. De hecho, SilverStorm El Salvador consiguió aguantar muchas de las acometidas de Patarò Calvisano de una forma que prácticamente rozó la perfección, consiguiendo evitar golpes de castigo, incluso en las pocas ocasiones en la que los de Brescia se acercaron a la línea de marca colegial.
Los últimos minutos del encuentro se convertirían, sin embargo, en algo completamente distinto, ya que SilverStorm El Salvador dejó de defender, para pasar a atacar de una forma absolutamente dominante al equipo italiano, poniendo en jaque su defensa gracias a buenas jugadas de pick and go, así como buenas patadas que daban los tres cuartos hasta el campo italiano cuando el oval llegaba a los dominios españoles.
De hecho, el partido concluyó tras una larga jugada de ataque de los blanquinegros, que buscaban con melés contundentes, puntos de encuentro con gran dureza y buenas fases de ataque llegar hasta la línea de marca rival, estando a punto de conseguirlo en un par de ocasiones, pero finalmente Graeme Wells no dio tiempo para más, señalando el final de un encuentro que, pese a ser una derrota, deja enormemente satisfecho al equipo español por el esfuerzo realizado y la calidad del juego desplegado en este encuentro de la competición europea, en el que consiguió un punto bonus defensivo que le deja con un total de 6 en la tabla, igualando en el balance a Rovigo.