500 colaboraciones con el deporte

Hace unos días convocaba a los medios y amigos a una rueda de prensa para conmemorar su colaboración número 500 en una actividad deportiva. Con algo de retraso puesto que  ya son 506  las veces que, inalámbrico en mano, nos ha narrado lo que acontecía en una prueba de atletismo popular, ha dado paso a un combate de boxeo o ha solicitado con fuerza un aplauso para el equipo de baloncesto de la ciudad.Y ya piensa en otras 500 veces más.


La mañana del miércoles era la elegida por el speaker oficial del deporte vallisoletano para abarrotar la sala de prensa de la Fundación Municipal de Deportes acompañado de autoridades, de compañeros de trabajo a los que ha agradecido sus continuos cambios de turno de Demetrio Nieto, con quien hizo sus primeros pinitos en la primera edición de la carrera de los Pajarillos, de la que también fue mentor, de Justino Asenjo, de su familia que tanto le acompaña.

Las casualidades de la vida hicieron coincidir el evento del medio millar con la carrera en que los bomberos de Valladolid conmemoraba sus 500 años en la ciudad de Valladolid. En esta ocasión el vozarrón  de Jesús sólo dejó de narrar lo que acontecía mientras el obligado minuto de silencio por los bomberos caídos en acto de servicio era acompañado del ulular de la sirena. Los que coinciden/coincidimos en los acontecimientos deportivos que ameniza, sabemos que pocas cosas le hacen callar y solo una consigue sacarle de quicio, el que el público no aplauda a los deportistas.

Cuando se le ve actuar por primera vez, narrando el paso de los atletas en una carrera surge un sentimiento entre admiración y extrañeza: ¿cómo será capaza de fijarse en el dorsal, mirar el listado y jalear al corredor que alcanza la línea de meta o que aún tiene que dar un par de vueltas el recorrido? Si le preguntas la respuesta es la más lógica ,aunque la más difícil: “los conozco a todos”  Y es verdad, pero no solo a los que llevan toda la vida participando, quien no conoce a Pirri o a Oscar Fernández Giralda; lo profesional es saberse el nombre de infantiles y alevines. Porque profesionalidad es el adjetivo que mejor cuadra a las actuaciones de Jesús María Gómez Martín y no es calificativo que sólo deba unirse al cobro de un estipendio.

Ha amenazado con que, si las fuerzas no le fallan, habrá 500 más. Y que nosotros lo veamos