1-3: El Pucela disfruta en Gijón

Tarde de Copa, tarde de probaturas y oportunidades para los menos habituales. Eso es lo que ofreció Rubi en el césped de El Molinón, con nuevas caras pero un mismo estilo, el del control de juego, el de saber afrontar y leer el partido y, sobre todo, ser superior. Por todo ello, el Pucela ganó y dejó al jovencísimo Sporting en sólo un intento.

Dos partes bien diferenciadas en el primer tiempo, con un Real Valladolid agresivo y con ganas, dejando el Sporting agazapado atrás, a verlas venir. Los de Rubi comenzaron a buen ritmo, enchufados y deseosos de agradar, ya que en la alineación había jugadores como Timor, Carmona o Sastre, poco habituales y con intención de hacer dudar el técnico catalán. Precisamente Timor se convirtió en el protagonista de los primeros veinte minutos de partido. Suya fue una de las primeras ocasiones del encuentro, junto con una falta lanzada por Alfaro que se marchó fuera.

Pero lo mejor llegó en el minuto 21 de encuentro, cuando el propio Alejandro Alfaro lanzó un corner y, después hasta tres golpeos de cabeza, el esférico quedó suelto en la frontal del área y David Timor lo enganchó de volea con su pierna izquierda. El guardameta Alberto poco pudo hacer ante un disparo tan ajustado al palo. Desafortunadamente, el gol hizo que el Real Valladolid se echara atrás, o que el Sporting se desperezara, quizá ambas cosas. La cuestión es que, conforme pasaban los minutos, el conjunto local fue llegando a campo contrario. Primero Carlos Castro, con un tiro suave que atajó Varas sin problemas, después Mandi, cuyo lanzamiento se marchó desviado. Pero el peligro llegó por la banda derecha sportinguista, donde Alberto Lora campaba a sus anchas. Una internada del lateral obligó a Chus Herrero a irse al suelo para evitar un centro y el balón golpeó en la mano del capitán blanquivioleta. Por suerte, el árbitro decretó que tal infracción había sucedido fuera del área. Pasó el peligro.

Aun así, el Real Valladolid tuvo tiempo de aprovechar alguna contra, utilizando hábilmente los espacios que dejaba el equipo de Abelardo. En una de esas, Omar condujo en exceso y no vio, o no quiso ver, la cabalgada de Mojica o el desmarque de Roger. Una amarilla a Sastre, que se sumaba a la del propio Mojica anteriormente, cerró una primera parte ciclotímica, dividida, que dejó un injusto resultado favorable para el conjunto visitante.

Tras el paso por vestuarios, el partido vivió cierta igualdad, propiciada por el mismo empuje del Sporting y un mayor aplomo del Pucela, pero la sensación latente era de poco peligro para Javi Varas, con lo que el partido transcurría con cierta tranquilidad, a la espera de “algo”. Y esa chispa la pusieron, al alimón, Roger y Alfaro. El extremo onubense dejó de tacón al valenciano en la frontal, éste condujo unos metros y devolvió un pase medido a su compañero para que batiera a Alberto. Era el primer gol de Alfaro con la camiseta blanquivioleta. 

Por su parte, el Sporting pareció expirar su última bocanada de aire, algo que intentaba evitar en lo posible el recién ingresado Joni. Aprovechando un desajuste en la defensa, provocado por el cambio de Jorge por Marc Valiente, el propio Joni cruzó el balón al lado opuesto de Javi Varas, que nada pudo hacer. Corría el minuto 65 de partido y El Molinón creía en el empate, algo que se encargó de cortar de raíz el Real Valladolid. Un saque de falta de Óscar Díaz golpeó en un compañero, el rechace le cayó a Roger que habilitó a Samuel, quien remató por dos veces a la portería sportinguista, convirtiendo el tercer y definitivo gol, que daba el pase al Pucela a la siguiente ronda de la Copa del Rey.

Tras el gol de Samuel, las gradas gijonesas se fueron vaciando, conscientes de la dificultad de una remontada que no se produciría. Victoria contundente, de pretigio y solera para el Real Valladolid, que demostró más poso que un imberbe Sporting de Gijón. Las conclusiones que saca Rubi, con jugadores menos habituales rindiendo a buen nivel, deben ser, cuando menos, positivas.

1.- SPORTING DE GIJÓN: Alberto, Lora, Luis Hernández, Julio, Isma López, Rachid, Mandi, Muñiz (Serrano, min. 61), Pablo Pérez (Joni, min. 61), Álvaro Bustos y Carlos Castro (Guerrero, min. 72)

3.- REAL VALLADOLID: Javi Varas, Carmona, Samuel, Chus Herrero, Mojica, Sastre, Timor, Alfaro, Jorge Hernández (Marc Valiente, min. 63), Omar (Óscar Díaz, min. 71) y Roger (Óscar, min. 77)

Goles: 0-1 Timor (min. 22); 0-2 Alfaro (min. 58); 1-2 Joni (min. 65); 1-3 Samuel (min. 73)

Árbitro: Ricardo De Burgos Bengoetxea. Amonestó con cartulina amarilla a Mandi (min. 55) por parte local y a Mojica (min. 36), Sastre (min. 45) y Carmona (min. 69) del lado vallisoletano.