Embajadores con brillo
Miguel Sáez y Álvaro de Frutos han demostrado que tienen un gran presente, pero un mejor futuro. Los dos deportistas sordos de Castilla y León fueron protagonistas en los pasados Juegos Sordolímpicos de Bulgaria.
Sáez consiguió un diploma, gracias a su buen hacer sobre la bicicleta en la prueba de ruta (100 kilómetros). El ciclista vallisoletano, una de las promesas más firmes del pelotón regional, rubricó su séptimo puesto en carretera, con el décimo tercero en el sprint 1.000 metros y con el décimo séptimo en contrarreloj.
Los éxitos no se limitaron a las dos ruedas. El nadador segoviano Álvaro de Frutos regresó de la piscina de Sofía con seis récords de España. El próximo deportista del Centro de Perfeccionamiento Técnico Deportivo Río Esgueva de Valladolid brilló en las pruebas de braza, ya que subió el nivel nacional en los 50 metros (33:33), en los 100 (1:15:87) y en los 200 (2:39:91). Álvaro completó su actuación con sus cronos en las modalidades de mariposa. Batió el récord en los 50 (30:30), en los 100 (1:09:07) y en los 200 (2:39:42).
Los dos deportistas de Castilla y León contribuyeron a los buenos resultados de la expedición nacional, que logró siete diplomas y once récords de España con una delegación muy joven. La selección de la Federación Española de Deportes para Sordos (FEDS) regresó con buenas sensaciones de un evento mundial que contó con la participación de 4.500 personas procedentes de 80 países distribuidos en 19 modalidades deportivas.
La FEDS estuvo representada en esta edición por 24 personas en cinco disciplinas deportivas (atletismo, natación, ciclismo, mountain bike y tenis).
