Tarde para la alegría

Precisa una alegría, un homenaje ante su público aderezado en goles, que son amores. Los tres tropiezos consecutivos, unos más injustos que otros, no han minado la moral del equipo, pero sí urge certificar los buenos mimbres con un nuevo triunfo y con una mayor capacidad para magullar a sus oponentes.

Más en Zorrilla, donde conviene que se escapen los menos puntos posibles y menos, valga la redundancia ante rivales directos como este descarado Rayo Vallecano de Paco Jémez. Los jugadores lo saben y durante la semana han hablado de superar el miedo escénico que adolecieron en el Vicente Calderón.

De cualquier modo, la idea que late en el vestuario es que el equipo vallisoletano es capaz de tutear, de mandar ante cualquier adversario con su ímpetu por dominar el trato de balón. Ahora bien, debe encontrar una mayor profundidad y mordiente arriba.

Djukic lo ha detectado y ha trabajado durante la semana con un cambio en ese sentido, ensayando con el angoleño Manucho en detrimento de Javi Guerra, quien no se esconde y reconoce que debe mejorar.

Manucho apunta al once, mientras que Ebert podría entrar en la convocatoria definitiva si la prueba previa resulta positiva. Ha entrado en una lista de 19 pese a que en jornadas anteriores se le daba por descartado a tenor de las molestias que arrastra en los isquiotibiales. Por su parte, Neira regresa a la lista.

Así las cosas, la única ausencia es la de Lluís Sastre y la citación es la compuesta por Jaime, Dani, Rukavina, Rueda, Sereno, Valiente, Peña, Balenziaga, Álvaro Rubio, Baraja, Víctor Pérez, Omar, Lolo, Ebert, Bueno, Neira, Óscar, Manucho y Javi Guerra.