Otra forma de hacer deporte
´Un año más, los vallisoletanos han inundado de lazos narajas los alrededores del Campo Grande y han mostrado su espíritu solidario en la lucha frente al cáncer infantil. Alrededor de 400 participantes, entre niños y no tan niños, disfrutaron de un ambiente familiar y festivo durante la celebración de la II Marcha Valladolid Solidaria. La recaudación obtenida del precio de las inscripciones se destinará integramente para dotar la III beca de investigación de la leucemia linfoblástica aguda.
La marcha comenzaba a las 11,30 horas, con el pistoletazo de salida por parte del alcalde Francisco Javier León de la Riva, junto a la modelo medinense Sandra Ibarra, presidenta de la Fundación Sandra Ibarra de Solidaridad Frente al Cáncer. El inicio tuvo lugar en la Acera Recoletos y continuó hasta la Plaza Colón. Esta iniciativa solidaria reunió a todos los participantes en cinco carreras. La primera, que aglutinó a todos los corredores -niños, jóvenes y mayores-, y las otras cuatro para los niños de 3 a 14 años.
Durante la celebración de la II Marcha Solidaria, la modelo Sandra Ibarra tuvo palabras de agradecimiento hacia todos los vallisoletanos que estaban presentes. No fue una competición, ni un juego con ganadores ni perdedores. La II Marcha Solidaria fue una carrera en la que "todos ganan", y en especial una causa "por y para" los más pequeños que sufren esta enfermedad. Todos los niños, que sin duda fueron los protagonistas, recibieron una medalla como reconocimiento a su solidaridad y esfuerzo. Sin olvidarse de los adultos, la Fundación, junto con otros organizadores y patrocinadores, invitó a todos a una chocolatada y un plato muy castellano, unas sopas de ajo.
Asimismo, Sandra Ibarra mostró su satisfacción por dar continuidad a la investigación a través de una nueva beca, en un momento en que como ella expresó "es difícil para las administraciones públicas que no pueden dedicar recursos a la investigación médica".