La destreza del deporte a lomos de un pony
Los alumnos del Centro Ecuestre-Pony Club Soto Ocio de Valladolid acabaron encantados con la exhibición de horseball que vieron de los jinetes palentinos y rogaron a su club que creara también un equipo en Valladolid. Misión cumplida. Desde la gerencia del club vallisoletano pensaron en traer a dos equipos de categoría Ponis A del Club deportivo Horseball Palencia para jugar un partido y que todos pudieran disfrutar de esta original modalidad de juego.
El horseball enfrenta a dos equipos de cuatro jugadores (más dos reservas) que portan un balón con asas de cuero y deben encestarlo como en el baloncesto en unas canastas verticales. No pueden desmontarse del caballo para recoger la pelota del suelo, al estar unidos los estribos por debajo del caballo con una cincha.
Así, el público congregado disfrutó al ver la destreza de los jugadores de delfines contra erizos, arbitrados por el jugador de la selección española Hugo de Prado, a lomos de los ponis. Al acabar el partido, los alumnos vallisoletanos tuvieron la oportunidad de probar este deporte y recibir su bautismo de horseball.
"Queremos introducirlo como deportivo colectivo, que vean la importancia del equipo, que no siempre montar en el pony es individual", explica la directora gerente, Leticia García Herrero. "Además, jugando también aprenden a montar sin darse cuenta", apunta la coordinadora Paloma Escribano. Todo ello es acorde con la línea que mantiene el Club Soto Ocio Valladolid desde que se creó hace dos años: ser un centro familiar, hacer deporte divirtiéndose y tener un buen ambiente social; de hecho, lo mismo celebran Halloween, Navidad o Carnaval.
En enero de 2010 eran 48 alumnos, y ahora han superado los 225, que asisten una o dos horas a la semana a clase de doma, salto, clásico y volteo con 6 profesores. Además de los pequeños de 3 a 5 años que acuden a introducción a la equitación en la kinder class."Si creamos un equipo de horseball tendrán que venir a clase 3 horas a la semana y mucha clase de doma, que no les gusta nada", dicen ambas responsables ante la cara de sopresa de las alumnas que acaban de pedirles que organicen un equipo porque les ha gustado mucho.
Son niños (la mayoría niñas) de 9 a 12 años de ponis A, aunque luego van subiendo de tamaño hasta caballos. "Los palentinos son muy buenos y han viajado mucho a Campeonatos de Europa, han estado en Francia, Inglaterra, Austria, Portugal...por eso queríamos traerlo aquí para empezar a introducirlo poco a poco en Valladolid", dicen. El club palentino de Villamartín de Campos (ubicado en el Centro Ecuestre La Posada de Campos) ha organizado también la primera liga nacional de Horseball y cuenta con jugadores internacionales en sus equipos.
Tras los agradecimientos y las fotos de rigor, la jornada terminó con un pequeño partido integrado por dos equipos mixtos conformados por jugadores vallisoletanos y palentinos.