El INVADE reconoce el tesón de Rosalía Alonso
No es un deporte que habitualmente salga en los grandes medios de comunicación, salvo cuando se convierte en el voley play de unos Juegos Olímpicos, pero en esta ocasión la versión en pista del voleibol vallisoletano ha sido noticia. Y es que el Instituto Vallisoletano del Deporte, INVADE, decidió conceder su premio de mejor deportista del año a la jugador del Voley Haro, Rosalía Alonso Mañero.
Una joven de tan solo 23 años que hace ya alguno decidió volcarse en este deporte y vivir la dureza pero también las alegrías de una disciplina que intenta hacerse un hueco en el panorama internacional, sobre todo femenino, y que vive como pocos las penurias de la crisis económica.
"Es el primer premio que recibo a título individual y la verdad que me hace mucha ilusión, ya que no me lo esperaba. Es un deporte que no se ve mucho y que se acuerden de mi, después de tantos años fuera de Valladolid, es muy especial", reconocía Rosalía minutos antes de recibir el premio.
Rosalía comenzó en una de las cunas del voleibol local, el colegio San José, y de ahí ya dio el salto a la concentración permanente que la Federación Regional tiene en la Residencia de Rio Esgueva y luego a la concentración permanente de la Federación Española. Luego llegó su andaduda profesional en equipos como Toledo, Universidad de Granada y Haro, donde milita actualmente y donde en breve luchará por la Supercopa de España ante su afición.
Esta central tiene en su palmarés el título de campeona de la Copa de la Reina con su equipo, subcampeona de la Superliga Femenina, cuarta mejor bloqueadora de la Liga, décima mejor sacadora y el octavo mejor porcentaje de ataque. Además, en su curriculum figura una medalla de bronce en el Mundial Juvenil y campeona de España con Castilla y León por selecciones autonómicas. A todo ello se une el que actualmente estudia 4º de Derecho por la UNED, algo que lleva "sacando tiempo de donde puedo", reconoce.
Rosalía es consciente de que la liga española femenina ha bajado mucho por culpa de la crisis, pero a ella le preocupa sobre todo "mejorar individual y colectivamente e intentar subir puestos en la clasificación cada año. Me gusta el voleibol y sueño con lo máximo".