El CPLV Dismeva escribe otra página a su brillante palmarés en la Copa

Ante los baleares, los chicos de Ángel Ruiz salieron como motos. El apoyo del público, más de 1.600 personas en las gradas del Polideportivo de los Cerros, motivó sobremanera el comienzo espectacular del Dismeva. El guardameta visitante Bobby Mason se tenía que emplear a fondo para desbaratar las embestidas de los Chavira, Cádiz, Zacha y compañía, y el primer gol era cuestión de tiempo.

Sólo dos minutos pasaron para que la estrella del CPLV, el estadounidense Itan Chavira consiguiese el primer tanto de un espectacular lanzamiento desde larga distancia. Sin embargo el gol, enfureció a los mallorquines que en apenas 3 minutos consiguieron reestablecer la igualada, gracias a un gran gol del americano Meter John Tallo, el mejor jugador de los visitantes.

Pronto vino la reacción por parte del Dismeva. Olmo, una espectacular jugada individual, se marchaba de todos cuantos salían a su paso, y con el mejor gol del torneo batía por segunda vez a Mason.

Con el marcador a favor, el CPLV se volcó sobre la portería balear. De hecho, en apenas 5 minutos de juego, el portero británico detuvo hasta 8 lanzamientos de los locales, un tiempo de claro dominio del CPLV. Sin embargo no fue hasta el minuto 12 cuando el electrónico se movía a favor de los locales. Rubén, muy atento, se aprovechaba de un rechace del portero Mason para hacer el tercer gol para alegría de la afición pucelana.

Un primer tiempo de ensueño que se completaba con el segundo tanto de Chavira, el cuarto para los pucelanos, después de una maravillosa jugada personal. Con 4-1 se llegaba al descanso. Un resultado que aparentemente aportaba tranquilidad al conjunto de Ángel Ruiz.

Tranquilidad que duró sólo dos minutos. Es esloveno Nejc Sotlar, uno de los mejores jugadores del mundo, y desaparecido hasta el momento, salió a relucir cuando su equipo más lo necesitaba con un magistral lanzamiento que se colaba en la portería de Roman Handl.

Los baleares sabía que el empate no estaba muy lejos, por eso, los vallisoletanos apretaron los dientes y aumentaron notablemente su nivel de juego. Fruto de ese dominio, Chavira hacía el quinto para el Dismeva, el tercero de su cuenta particular, después de una maravillosa jugada con su compatriota Junior Cádiz.

Faltaban aún 15 minutos. Un cuarto de hora que se hizo muy largo. El Mallorca se volcó y de hecho el entrenador visitante decidió jugar varios minutos sin portero y con 5 jugadores de pista, para intentar remontar el marcador adverso. Albert metía el miedo en el cuerpo a falta de 8 minutos para el final con un tremendo disparo, ante el que nada podía hacer Handl, y el propio jugador balear lograba el cuarto para el Espanya a falta de 10 segundos para la conclusión. 

No había tiempo para más. El Mallorca lo intentó, pero el CPLV supo administrar la renta para sumar su quinta Copa del Rey. De nuevo el equipo más laureado de la ciudad no faltaba a su cita con los títulos y en casa los vallisoletanos no fallaron. Ante más 1.600 personas, los jugadores brindaron un triunfo histórico que hace del CPLV el dominador absoluto de esta competición. Ahora de nuevo, a pensar en la liga y en conseguir ese triplete que puede ser histórico.