Foto- Valladoliddeporte.es
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Deporte en familia para bajar el turrón

26 de Diciembre de 2010

Padres, madres e hijos optaron hoy por pasar un día diferente. Alejados del aburrido mito dominguero de la tele y el sofá se enfundaron el chándal, se ataron los cordones de las playeras, se sacudieron la pereza y se acercaron al polideportivo Huerta del Rey para disfrutar de la magia del deporte en familia, como mandan los días, y es que, la ocasión lo merecía. El Memorial Santos Villanueva organizado por la Fundación Eusebio Sacristán convocó a más de 450 personas, que se divirtieron con las actividades organizadas. Sin vergüenza alguna, progenitores y descendientes movieron las caderas al ritmo de la batuca y el aerobic y pusieron a prueba su pericia deportiva con pruebas como el lanzamiento de peso, salto de altura y longitud, tiros a canasta o en el circuito de agilidad. Un día en el que el cansancio de los  padres servirá de ejemplo a los atletas del futuro.


"Hemos organizado esta fiesta con la idea de honrar a Santos y de que los niños disfruten del deporte en familia", explica el ex futbolista del Real Valladolid y del Barcelona, Eusebio Sacristán. Para motivar a que las familias se levantaran de la cama, la organización premió la participación la entrega de regalos entregados por las empresas colaboradoras, como lotes de productos Cascajares, teléfonos móviles y las camisetas oficiales del Real Valladolid, Blancos de Rueda y Cuatro Rayas firmadas por sus jugadores.


Un Memorial con fines solidarios


El Día del Deporte en Familia no sólo servía para rendir homenaje a uno de los políticos con más futuros de la comunidad, sino también para una gran persona, amante del deporte y amigo de sus amigos, como se pudo ver en Huerta del Rey. Gracias a los patrocinadores del evento, se podrá llevar a cabo el objetivo principal de ésta cita deportiva: la organización del I Campus Santos Villanueva para niños discapacitados. Una iniciativa que llevará a cabo las manos de la Fundación Eusebio Sacristán, que ya tiene experiencia en la coordinación de este tipo de actividades solidarias con la dirección de campamentos deportivos para inmigrantes y niños sordos. "La idea es hacer un campo de integración a través el deporte. Se trata de que la gente empiece a hacer deporte desde muy pequeños y que lo haga en familia. Que sean los padres los que inicien a los pequeños", explica Nuria Sancho, viuda del político fallecido.


Canastas solidarias


Los ex jugadores del Baloncesto Valladolid demostraron que el tiempo no ha robado la magia de sus muñecas. Los amigos de Santos Villanueva, fueron un juguete en manos de los Miguel Ángel Reyes, Paulo Bento y demás viejas glorias del Forum. A falta de un minuto del final el marcador dio una segunda oportunidad a los amigos del fallecido político, que vieron cómo el marcador marcaba un empate cuando dos segundos antes les lapidaban 20 puntos abajo. Una ventaja aplaudida por el público, al que, al igual que a los jugadores, les importaba más el espectáculo que el resultado. El conjunto capitaneado por el presidente de la Diputación, Ramiro Ruiz Medrano, no supo aprovechar el regalo y terminaron hincando la rodilla. Un marcador de 51-53 para la escuadra morada y un empate en entrega y espectáculo.


Pocos goles, mucha diversión


El colofón del día tenía un brillo especial. Brillo de estrella. Viejas glorias del Real Valladolid como Turiel, Isailovic, Eusebio, Juan Carlos, Torres Gómez o Alberto, compartieron parqué con toreros como Joselillo o Manolo Sánchez, políticos como Ruíz Medrano, ex atletas como el piragüista Juan Manuel Castro, e incluso un ex jugador del Balonmano Valladolid, David Davies, que aprovechó su conocimiento del campo de batalla para abrir el marcador a los pocos minutos de empezar el partido.


En el segundo periodo las cosas pintaban mal para el equipo de Eusebio, que vio cómo la ventaja obtenida con el gol de Davies se venía abajo con una volea inapelable del Alberto. El médico del Real Valladolid hizo gala del poderío ofensivo que mostró en su etapa como profesional, pero poco duró la alegría en casa de los hombres de Juan Carlos, que volvieron  a ponerse por debajo en el marcador, a los pocos segundos, una vez más.


El segundo gol de los hombres de Eusebio fue un punto de inflexión en el partido, que comenzó a ganar en emoción y competitividad. Entre tanto futbolista el que tuvo que sacar la muleta para capear el temporal fue el diestro Manolo Sánchez, que colocó las tablas en el marcador con un testarazo que valía su peso en oro.


El empate llevó a una surrealista prorroga en la que todos los integrantes de ambos equipos saltaron en campo en una divertida escena digna del camarote de los hermanos Marx que terminó con un gol en propia meta que otorgó una bizarra victoria a los amigos de Juan Carlos.