Imagen de la prueba del pasado año
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Iñigo y Mikel, los aventureros de la UEMC
El Cuatro latas que les llevará
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Aventura solidaria en 'Cuatro latas'

27 de Diciembre de 2011

La Universidad Europea Miguel de Cervantes (UEMC) de Valladolid contará con un equipo en la aventura 4L Trophy 2012, un rally solidario protagonizado por estudiantes universitarios europeos que conduciendo un Renault 4L llevan un mínimo de 50 kilos de ayuda humanitaria (material escolar, ropa deportiva, juguetes, etc.) a los niños del desierto de Marruecos. La aventura, que este año celebra su XV edición, contó en 2011 con la participación de cerca de 3.000 estudiantes, a bordo de más de 1.200 “Cuatro Latas”.


Dos estudiantes navarros de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de la UEMC, Iñigo Ocariz Aguirre y Mikel Markotegi Díez, serán los encargados de protagonizar un viaje de estudios “distinto al habitual, con un carácter más humanitario, aventurero y mucho más enriquecedor”. La edición de 2012 del 4L Trophy se celebrará del 16 al 26 de febrero, y comenzará en las ciudades de París, Burdeos, Niza y San Juan de Luz. Se atravesará en caravana la península ibérica hasta Algeciras y, tras cruzar en barco el Mediterráneo, se adentrarán en Marruecos hasta llegar a los desiertos del sur del país, donde se repartirá la ayuda. El modelo de coche con el que se realiza la expedición es el mismo para todos los participantes: el Renault 4 L, comúnmente conocido como “Cuatro latas”.


Aparte esta dimensión humanitaria, el viaje en el que participará el equipo de la UEMC consiste en una competición deportiva de varias etapas. En cada una se asigna a los participantes un número máximo de kilómetros a recorrer entre dos puntos. Cada kilómetro de más que se realice se penaliza. Con estas etapas se completa una prueba de orientación en el desierto. Una vez que se llega a los diferentes pueblos se lleva a cabo el reparto de la ayuda humanitaria y los participantes colaboran como peones en las diferentes instalaciones de paneles y bombas de agua.


No gana el que antes llegue, por lo tanto no importa la velocidad, si no el saber orientarse y administrar lo mejor posible los kilómetros. El coche deberá estar lo mejor preparado posible, y sólo se puede participar con el emblemático Renault 4L. Están permitidas todo tipo de preparaciones en el coche, respetando el radio de las ruedas y siempre y cuando no afecten a la seguridad del vehículo. Una vez concluidas las labores humanitarias se regresa al punto de partida. En total se completan más de 6.000 kilómetros.


Cuota y solidaridad


Los participantes abonan 3.100 euros por la inscripción y la organización les procura la comida, pero tendrán que dormir por su cuenta, normalmente en tiendas de campaña junto a los coches al término de cada etapa. La aventura 4L Trophy 2012 pretende fomentar la colaboración y cooperación entre los jóvenes estudiantes de diferentes países para lograr juntos las metas fijadas, entregando ayuda humanitaria y material escolar a los niños del desierto y colaborando en tareas de mejora de infraestructuras (instalación de bombas de agua, paneles solares, etc.). El evento tiene, pues, una triple dimensión: ayuda humanitaria, aventura deportiva y concienciación ecológica.


La ayuda humanitaria se repartirá por diversos poblados del norte de África. Durante el recorrido se instalarán, además, paneles solares para que tengan electricidad en sus viviendas y bombas en los pozos que permitan suministro regular de agua. Asimismo se repartirán juguetes y material deportivo para mejorar la calidad de vida de los más jóvenes.


El 4L Trophy está organizado por un antiguo participante en el París-Dakar, Jean Jacques Rey, que pretende recuperar el viejo espíritu de este rally, con la colaboración de la ESC Rennes (Escuela de Negocios de la Universidad de Rennes en Francia) y la ONG “Enfants du désert”. Frente a los 6 participantes de 1998, en la última edición tomaron parte 1.200 coches y casi 3.000 estudiantes, que llevaron 80 toneladas de ayuda. La mayoría de los participantes son franceses, holandeses, alemanes, ingleses y belgas. Entre todas las ediciones se ha conseguido escolarizar, en buenas condiciones, a 70.000 niños en el sur de Marruecos.