Amaya Alonso roza el podio en Holanda
La nadadora con discapacidad visual Amaya Alonso rozó el podio en el Campeonato del Mundo de Natación. La vallisoletana, que llegaba a la cita en el Pieter Van Der Hoogenband Swimming Stadium de Eindhoven (Holanda) con la intención de colgarse alguna medalla, se quedó, por el momento, a las puertas del metal en las pruebas disputadas.
Alonso, diploma olímpico en Pekín, finalizó cuarta en la prueba de los 100 metros mariposa, puesto que repitió en los 200 estilos. «Tenía posibilidades en los 200, pero no ha podido ser. Me quedo con la satisfacción de haberlo dado todo», explica la nadadora de Valladolid. Amaya también participó en los 100 metros braza donde, pese a llegar a la final, no pudo pasar del octavo puesto.
La de Huerta del Rey aún competirá en los 400 metros libres y en los 100 libres, pruebas que cerrarán un Mundial en el que España ya suma siete metales gracias a las platas obtenidas por Richard Oribe (2), la de Sarai Gascón, la de Chano Rodríguez y la del relevo de 4x100 libre para ciegos y deficientes visuales. De bronce fueron los metales logrados por David Levecq y Enrique Floriano, en los 100 metros mariposa y en los 100 braza.
Alejandro Sánchez irrumpe en las finales
El otro representante de la delegación castellano y leonesa, el salmantino Alejandro Sánchez, accedió a las dos finales en las pruebas que tomaba parte. El nadador, afincado en Palma de Mallorca, consiguió el séptimo puesto en los 100 metros braza y el octavo en los 200 estilos.
El equipo paralímpico español que compite en este Mundial está formado por 38 deportistas: 21 discapacitados físicos, diez ciegos o deficientes visuales, cinco con parálisis cerebral y dos discapacitados intelectuales. De estos 38 nadadores, 22 son hombres y 16 mujeres.
Las 96 pruebas de este campeonato, que ha reunido a más de 650 deportistas de 54 países, se celebran en la piscina cubierta de 50 metros y 10 calles situada en el Complejo de Natación Pieter Van Der Hoogenband, dedicado a este tricampeón olímpico holandés. Además, habrá una competición de aguas abiertas, que constará de cinco kilómetros y que se celebrará en el lago E3 Strand de Eersel, una pequeña localidad cercana.
En la natación paralímpica, los participantes se dividen en catorce clases, en función de su tipo y grado de discapacidad. Diez de ellas engloban a los deportistas con parálisis cerebral y discapacidad física (desde la S1 para los más afectados hasta la S10 para los más leves), mientras que otras tres agrupan a nadadores ciegos (S11) y deficientes visuales (S12 y S13). La S14 se reserva para los discapacitados intelectuales.
