Portugal llega para "devolver al Valladolid al sitio que se merece"

Portugal ya conoce la casa. No en vano, el técnico burgalés fue jugador del conjunto vallisoletano hace muchos años, aunque apenas pudo disputar tres partidos. Ahora con 60 años y mucha más experiencia, vuelve a Zorrilla para intentar cambiar el rumbo de un equipo que "en teoría" aspira al ascenso y que está en puestos de descenso a Segunda B.

"Esta es una situación que ningún entrenador quiere y por eso lo primero que quiero hacer es desearle lo mejor a Garitano", fueron sus primeras palabras antes de reconocer que había visto los últimos partidos del conjunto vallisoletano. "Tiene buen equipo, buena plantilla pero a veces los resultados no hacen justicia y no reflejan lo que el equipo ha podido hacer".

Portugal asegura que llega "con la máxima ilusión y con el deseo de devolver al Valladolid al sitio que se merece". Para ello lo primero que quiere cambiar la "mentalidad del jugador y la dinámica negativa que rodea al equipo. Hay que ganar y ahora hay que hacerlo para que el estado anímico se eleve. Es la mejor medicina para un equipo con la racha negativa que tiene éste".

El entrenador burgalés afirmó que no le importa en absoluto que el Valladolid esté ahora mismo en puestos de descenso. "No me he fijado en la tabla clasificatoria. Me he fijado en la historia de este Club y es una entidad a la que siempre he querido poder entrenar, incluso a pesar de estar en Segunda División. Solo me fijo en los objetivos que tiene y vengo a luchar por ellos".  

Portugal incorpora al cuerpo técnico al entrenador del filia, Rubén Albés, y al ex jugador Javier Baraja, además de un preparador físico que compartirá funciones con Julio Hernando. Todos con un objetivo común. "Hay que trabajar para ganar. Hay que conseguir que recuperen la confianza y poner algunos conceptos pero sin entrar a romper con nada".