El tren al 'play-off' pasa por Zorrilla
Bastante es tener opciones de soñar a estas alturas de temporada. El irregular curso del Real Valladolid en la Liga Adelante todavía se puede salvar gracias al nuevo sistema de ascenso, pero las oportunidades llegan a su fin. El equipo blanquivioleta cayó derrotado en Las Palmas y con ello se rompió una racha de cinco jornadas consecutivas sin perder. Diez días han pasado desde ese partido, más que suficiente para recuperar el ánimo. A nadie le gusta jugar un lunes, pero hace tiempo que la Liga dejó de pensar en lo que quieren los clubes. Ni que decir tiene que menos todavía en lo que quieren los aficionados.
La única sorpresa en la convocatoria del técnico manchego ha sido la ausencia de Quique. Canterano por canterano. Al mediapunta le sustituye en la lista Bacari, que lucirá por primera vez el número 28. Sin embargo, llama la atención el cambio. La gran necesidad del equipo es la misma que hace dos meses: un delantero centro que acompañe o sustituya a Javi Guerra. ¿Se ha equivocado de jugador Abel Resino durante todo este tiempo? Cada partido es un mundo, sería la previsible respuesta de un entrenador.
La lesión de Nauzet Alemán, que se perderá el de hoy y otros tres partidos, obligan a cambios respecto a lo visto en anteriores jornadas. La retaguardia no promete variaciones. Javi Jiménez en portería y Barragán, Juanito, Jordi y Peña en defensa. El doble pivote, con Javi Baraja y Matabuena, parece convencer a Abel. Apunta a que Álvaro Antón cambiará de banda y empezará en la derecha, Jofre estará en la izquierda y Óscar precederá a Guerra en ataque. Desde la grada verán el encuentro, por decisión técnica, Rubio, Rueda, Faria, Lázaro, Jacobo, Raúl Navas además de Quique.
El Girona tiene bajas importantes. Chechu y Moha, lesionados, y Serra y Tébar, sancionados, se han quedado en tierras catalanas. Santamaría, Jose, Migue, Tortolero, Bautista, Angel, Dorca, Jandro, Keko, Peragón y Despotovic pueden ser los 11 jugadores que alinee Raul Agné de inicio.