El joven Bruno Varela, preparado para el reto

Varela, un joven guardameta de un 1,91 centímetros, demostró una habilidad inesperada para hablar en castellano. Lo hizo también que fue motivo de preguntas de los periodistas sobre su capacidad de aprendizaje. “No he hecho ningún curso de castellano. Es un idioma que no es difícil, pero hay que intentarlo día a día”, dijo siempre con la sonrisa en la boca.

“El Real Valladolid es un gran Club y me ha gustado el proyecto que me presentaron el presidente, el director deportivo y el entrenador. En el Benfica estaba en el equipo B y creo que la Segunda división de España es muy diferente  a la de Portugal, es mucho más competitiva en todos los aspectos, y para mí es un paso más en mi carrera”, respondió cuando fue preguntado por los motivos de su fichaje.

“Kepa y Julio son porteros de mucha calidad y vamos a competir muy duro por la titularidad. Va a ser una pelea buena. Hay que trabajar mucho durante toda la temporada y esperaré mi oportunidad”, dijo cuando tuvo que hablar de sus posibilidades de ganarse un puesto en el equipo titular. “Me considero un portero rápido, de buenos reflejos y con un poco de todo, en general”, contestó cuando le tocó definirse como arquero.

“El equipo está bien. Es un equipo con calidad, pero todos sabemos que hemos venido muchos jugadores nuevos y todos estamos asimilando el proceso, los nuevos y los que ya estaban. Hay que asimilar ganando. Eso es lo importante. El equipo tiene muchas ganas de hacer las cosas bien, de entrenar fuerte todos los días, con mucha intensidad, y con muchas ganas de asimilar rápidamente lo que el entrenador quiere”, subrayó cuando le tocó opinar sobre cómo ve al equipo blanquivioleta.

Por último, fue preguntado sobre qué pasará cuando coincidan en sus convocatorias con las Selecciones Sub21 de España y Portugal tanto él como Kepa. “Si tengo que jugar con la Selección, perfecto porque es mi país y es un orgullo representarlo; y si tengo que jugar con el Real Valladolid, también perfecto porque es mi Club. Soy un profesional y hago lo que me mandan”, zanjó Bruno Varela con la disciplina espartana de un joven que solo quiere jugar y crecer como un portero que tiene como ídolo a Petr Cech.