El escenario de la reivindicación

Y es que Óscar retornó a su sitio, junto a los mejores y con el club que amamantó su vasto talento. Anotó el gol del primer triunfo blanquivioleta en esta nueva y añorada andanza en Primera División y, enseguida, señaló con los dos pulgares su dorsal, el 10. Un gesto que le salió de dentro, que no tiene un hedor a "vendetta", pero con el que quiso hacerse valer. ¡¿Qué hay de nuevo viejo?!.

"Por aquella época había un fondo que me pitaba. Guardo un muy buen recuerdo de la afición del Zaragoza, pero me salió esa celebración. Fue una especie de reivindicación. No una venganza", manifestó el futbolista salmantino.

Matices a una celebración que pudiera levantar ampollas. Un tanto que facilitó el triunfo en un partido que, en su opinión, se saldó "bastante mejor de lo que esperaba". "Después de una pretemporada corta y viendo que estamos todavía un poco justos, que nos falta la chispa que ganaremos en dos o tres semanas, el resultado fue bastante bueno", puntualizó.

De este modo, Óscar analizó el desarrolló del duelo. Opinó que en los primeros quince minutos del encuentro el Real Valladolid acusó "los nervios del debut", aunque soslayó que, después, el equipo se hizo con el control del partido.

"La primera parte fue nuestra. En la segunda ellos empezaron fuertes, presionando, pero no concedimos ocasiones claras. La defensa estuvo increíble. Los centrales inmensos. Es algo fundamental, porque si encajamos pocos goles, arriba vamos a generar oportunidades", explicó.

A su juicio, el equipo blanquivioleta se mantuvo fiel a su estilo. Lealtad a unos mimbres que, desde su punto de vista, experto y sin ambages, les puede capacitar para hacer "cosas bonitas". "Poseemos un bloque sólido desde la pasada campaña y tenemos las ideas claras. Haciendo las cosas bien podemos ganar a cualquiera", sostuvo el media punta.

En otro orden de cosas, Óscar señaló que en Segunda los equipos "presionan más", mientras que en Primera permiten que el adversario pueda tocar mejor al estar "más posicionados", aunque dejó que cualquier robo de balón "puede salir muy caro".

Por otro lado, se refirió al próximo compromiso liguero, el del próximo lunes ante el Levante (20,00 horas) y en el estadio José Zorrilla, donde, ha resaltado, el conjunto vallisoletano debe hacerse "fuerte". "Es dónde tenemos que sacar el máximo rendimientos y el punto en el que apoyarnos. Esperamos que haya una buena afluencia de pública a pesar de que el horario no acompaña", anotó.

Para finalizar, señaló que el cuadro valenciano será un rival "muy complicado", puesto que es un "bloque muy compacto", con futbolistas "veteranos" que llevan varios años "sabiendo a lo que juegan".