Ebert y Quincy, casos cerrados

La entidad blanquivioleta ha acordado con el Spartak de Moscú la indemnización económica por la salida de Patrick Ebert del Real Valladolid. El jugador decidió rescindir su contrato y abandonar el club, después de su negativa a jugar frente al Villarreal y la apertura de un expediente.

La situación, que ya tenía un pie dentro del juzgado, ha sido detenida por el conjunto ruso, que ha decidido compensar económicamente al conjunto pucelano, renunciando así a seguir por la vía jurídica en el “Caso Ebert”. La web del equipo no cifra la cantidad aportada por el equipo ruso, pero afirma que ha sido “justa”. Algunas informaciones apuntan que la cantidad de dinero percibida por el Real Valladolid ronda los 1,3 millones de euros. 

El Spartak de Moscú ha intervenido para que el extremo alemán pueda centrarse en su nueva etapa deportiva y que el Real Valladolid tuviera una compensación económica justa por los problemas causados por su exjugador. De este acuerdo se excluye la sanción que recibió el futbolista tras negarse a jugar el partido ante el Villarreal el 25 de enero.

El holandés que llegó para estar a prueba “unos días”. Sin embargo, esos días se conviertieron en semanas y finalmente no ha convencido a los responsables blanquivioletas, que este lunes hicieron oficial que el jugador no va a formar parte de la plantilla del Real Valladolid. 

Su forma física distaba bastante de la exigida por Juan Ignacio Martínez. Quincy ha estado entrenando mañana y tarde, siempre al margen del resto del equipo y sobre todo realizando ejercicios físicos, sin conseguir los resultados esperados.