Djukic y su sentimiento de culpa

Aclaró, eso sí, que no se arrepiente de lo que dijo tras el encuentro ante el Málaga, dado que es una persona "directa", pero recalcó que a él lo que le "encanta" es "el fútbol". "Hablar de tácticas, de cómo mejorar a mi equipo o mejorar yo. Cambiar a otras personas me resulta imposible", manifestó.

Incidió en que "nunca" se excusa o escuda en la actuación arbitral y que la "culpa" de las derrotas "siempre" es suya. "No quiero desviar la atención como pueden pensar algunos", agregó el técnico blanquivioleta.
 
"Me quedo con el juego de mi equipo, que estuvo muy bien plantado, trabajando bien defensivamente. Efectivamente no teníamos el balón, pero hemos jugado contra un buen equipo, poderoso. No podían encontrar espacios, excepto por algunos errores que hemos cometido. Ni puedo influir en el árbitro ni mi interesa", puntualizó.

De este modo, resaltó que prefiere hablar de su equipo, de la "buena campaña" que está haciendo, lo que se traduce en que allende el territorio se hable del Real Valladolid como un equipo "atrevido".

Una escuadra que atesora diez puntos y que está situada en la décima posición de la tabla clasificatoria de la Primera División. Situación privilegiada para un recién ascendido que este lunes (suena a flagrante pitorreo) recibe a la Real Sociedad, equipo que aún no ha puntuado a domicilio.

Registro negativo el de los donostiarras que pudiera dar un ápice de favoritismo al Real Valladolid, algo que Djukic rechazó rotundamente.  "No somos favoritos en ningún partido. Para ganar hay que esforzarse al máximo. No somos favoritos contra nadie. En base a esfuerzo y buen trabajo podemos ganar a cualquiera, incluso a Madrid y Barcelona", apuntó.

En este sentido, auguró una gran dificultad para sumar los tres puntos ante un equipo, la Real Sociedad, del que ha destacado su calidad y velocidad a la contra. "Por su inexperiencia o juventud no han puntuado fuera, pero tienen ente con mucha calidad, rápidos, con muy buena contra y buenas llegadas por las bandas. Es un equipo tremendamente ofensivos, por lo que hay que estar atentos. Jugamos en casa, pero hay que hacer las cosas muy bien si queremos llevarnos los tres puntos", anotó.

Un duelo para el que Djukic no cuenta con Manucho, pues se mostró convencido de que apelación no le retirará alguna de las dos amarillas que vio ante el Málaga, eliminándose de este modo el partido de sanción, a pesar de que en ninguna de las dos amonestaciones aprecia la infracción. "No vamos a cambiar", interpeló con resignación.

La más que posible ausencia del angoleño devuelve al once inicial a Javi Guerra. "Tiene su oportunidad y confiamos en él. No tiene que demostrarnos nada y debe salir tranquilo y hacer lo que sabe", declaró.

También se le cuestionó sobre otros jugadores y posibles variaciones en el once. Incidió en que está "contento" con todos sus futbolistas. "Todos los puestos los tengo muy bien cubiertos. Estoy mi contento con el equipo y con el grupo. Tengo un equipo muy bueno y suficiente para cumplir nuestro objetivo", añadió Djukic, que indicó que Sereno está haciendo cosas bien y que su alineación en las últimas jornadas no atiende a que haya detectado un bajón en Jesús Rueda.

Asimismo, y para concluir, explicó por qué puso a Dani Hernández en la portería por vez primera en lo que va de temporada y, de este modo, sentó a Jaime en el banco. "Pensábamos que necesitábamos dar tranquilidad a la portería, que Jaime después de dos fallos no tiene la suficiente tranquilidad", detalló el técnico, que entiende que Jaime no se haya tomado bien su suplencia.

El Real Valladolid se ha ejercitado este jueves por espacio de dos horas y con todos sus efectivos disponibles.