0-1: Naufragio colectivo

El partido empezó ya empezó mal para el conjunto vallisoletano, con la lesión muscular de André Leao en el minuto 11. Y continuó peor cuando Darwin Machís, en el minuto 26, culminó un contraataque eléctrico llevado por Álex González por la derecha. Su disparo fue repelido en primera instancia por Kepa, por el rechace lo aprovechó Machís -en posición dudosa-, para poner un 0-1 que a la postre fue definitivo.

El Real Valladolid de este domingo era un equipo sin ideas y sin alma. NI siquiera vale la justificación del gol anulado, por una falta previa del delantero blanquivioleta. Tampoco el estado del terreno de juego, igual de mal para ambos, ni el frío climatológico con el respeto que eso supone para un equipo que viene de las "tierras del norte".

Ese deambular por el cambio, con más pena que gloria, llevó al técnico Miguel Ángel Portugal a un movimiento poco habitual. Trató de evitar el derrumbe con la entrada de Óscar y Mojica por Manu del Moral, lesionado, y Rennella antes del descanso. Tres cambios antes del descanso, buscando una reacción que finalmente no se produjo.

Y es que en el segundo tiempo y con las ideas mucho más claras, el Huesca se limitó a defender con orden el resultado y ni siquiera sufrió cuando se quedó con un jugador menos por la expulsión de Bambock. Fue un querer y no poder porque el Huesca era claramente superior.

El próximo encuentro del Real Valladolid llegará el próximo sábado, a partir de las 20,15 horas, en el Estadio Carlos Tartiere de Oviedo. Un partido al que ya se han apuntado más de 1.200 seguidores vallisoletanos.