Una promesa que ya es toda una realidad
A sus 17 años, a punto de cumplir la mayoría de edad, Natalia García se ha convertido en uno de los referentes de futuro en categoría junior en el lanzamiento de peso. "Hace ocho años era velocista y saltaba longitud y también hacía baloncesto, pero nos quedamos sin equipo", comenta García, cuyo primer contacto con el peso se inició hace tres campañas: "Me animé por cambiar, por salir un poco de la rutina. Empecé porque era algo nuevo en el pueblo. Mi padre ha sido deportista y me hacía ilusión".
El deporte para Natalia lo es todo actualmente. Estudia 2ª de Bachillerato en el Instituto Alfonso VI de Olmedo, e intenta compaginar su formación académica con su desarrollo como deportista. "Se hace lo que se puede, de momento no he tenido problemas de estudio. Los profesores saben que compito pero nunca he cambiado un examen", indica la atleta. Sus referencias son Mayte Martínez y Manolo Martínez, de los que dice fijarse mucho en cada competición a la que acuden.
Su entrenador. Augusto San José, siempre ha estado a su lado desde que comenzó en el deporte. "Es el coordinador de Deportes de Pedrajas, he aprendido mucho con él y el trato es muy bueno, gracias a él estoy aquí", recuerda la atleta.
La vallisoletana entrena cuatro o cinco días a la semana de 17 a 19 horas en el Polideportivo Municipal Nicolás López, de la localidad de Pedrajas de San Esteban, más el día de la competición, junto a otras seis personas. Su preparación se divide en trabajo de fuerza, con las pesas, al que dedica dos días y el resto practica series de velocidad, carrera contínua y series de 400 metros."Tienes que hacer un poco de todo", comenta. "Hay que practicar multisaltos y multilanzamientos para coger fuerza en las piernas".
Reconoce que las instalaciones "se han quedado un poco pequeñas". "Siendo junior necesitamos algo más, para una velocista la pista se queda pequeña" y como deportista, no descarta dedicarse a otras especialidades: "Quiero probar con el disco, el año que viene espero poder meterme en el campeonato absoluto", confirma. Aunque es realista y sabe que estar con las mejores "es casi imposible ahora mismo, pero es una meta".
Para ella, lo más duro "es tanta constancia", ya que "tienes que estar encima todo el día, si paras se nota mucho y también cuando cogemos vacaciones".
El pasado 3 y 4 de julio, Natalia García compitió en el Campeonato de España, finalizando en novena posición, pero como ella misma resume, "no me salió muy bien". La vallisoletana ha acudido ya en su corta carrera a tres Campeonatos de España, dos con la Selección de Castilla y León y uno en individual.
García cree que el mejor consejo que se le puede dar a un joven que quiera practicar deporte es "que empiece siendo infantil o alevín, porque te acostumbras a la rutina. Si lo hubiera cogido ahora, no me habría metido en este mundo". Su sueño es llegar a convertirse en entrenadora y para ello quiere estudiar INEF o fisioterapia.
A Natalia la gustaría ir a León porque allí es donde "tienen una gran escuela de lanzadores", comenta. "Nunca había pensado en moverme de aquí, pero ahora ya no hay carreras aquí y tengo que seguir entrenando", explica.
El peso que lanza García es de cuatro kilos y a veces le ocasiona problemas en la espalda y en los dorsales, "por tanta serie y repetición". El año que viene espera "poder llegar más lejos" y mejorar su marca en el lanzamiento de peso. "Esta temporada tenía la ilusión de llegar a los 11 metros, pero me quedado en 10.95".
Natalia cree que con perseverancia y esfuerzo, lo logrará. "Hasta que no sobrepase los once metros no me quedaré tranquila. Cuesta bastante cuando alcanzas tu tope", concluye.
Natalia García tiene tiempo por delante para seguir mejorando, quién sabe si en un futuro cercano puede convertirse en una de las referencias del atletismo español.