Lucha y sacrificio por encima de todo lo demás
El instituto de La Merced participa durante este año escolar en el campeonato de fútbol sala tanto en categoría cadete como juvenil. La tarea de formación de los jóvenes para que logren unos óptimos resultados es obra de Mauro Pérez. La experiencia le avala, ya que son 21 años los que lleva ejerciendo en el IES La Merced. Anteriormente, también estuvo en el Ramón y Cajal.
Para él ha sido una gran ventaja el haber practicado deporte cuando era estudiante, ya que le permitió conocer perfectamente las labores y funciones que hoy lleva a la práctica. La Merced ofertó una serie de actividades extraescolares para sus alumnos (baloncesto, voleibol, bádminton y atletismo), pero únicamente logró formar dos grupos, uno de categoría cadete y otro juvenil, para el fútbol sala. "Ofertamos todo, judo, educación física, campo a través, pero cogimos esto porque es lo que salió" señala Mauro Pérez. "En clase de Educación Física fomentamos a la gente para que se apunte a realizar actividades deportivas", añade.
Los entrenadores con los que cuenta La Merced "son gente ordenada y trabajadora", que además guardan la característica de que han sido antiguos alumnos, como le sucede a Mauro. "El que seamos gente de la casa da mucha confianza porque nos conocemos todos", comenta.
"Tenemos 25 jugadores y es una gran responsabilidad el educarles a todos, pero contamos con una gran ventaja ya que todos ellos se conocen y nos lo ponen más fácil" expone el coordinador. Para él, hay algo que está por encima de los resultados y la clasificación final de sus equipos. "Lo fundamental es que jueguen todos, esa es mi máxima. Y que siempre saluden al contrario al terminar el partido, indiscutiblemente de lo que haya pasado".
Este año ha surgido una nueva polémica por parte de la Organización de los Juegos Escolares que es la situación de los entrenadores, ya que se ha exigido que todos ellos estén profesionalizados. Así ve la situación el coordinador de La Merced: "Este tema es complejo, lo quieren profesionalizar, pero para ello hay que hacer un cursillo de un año, aunque lo han reducido a tres meses. No es nada rentable para los entrenadores ya que se les paga muy poco por hora de trabajo".
La Merced cuenta con un entrenador que realiza las labores tanto en el equipo cadete como en el juvenil. Se trata de Alex Gómez, que además cumple su primer año al frente de los conjuntos. Ha sido alumno del centro por lo que también conoce perfectamente "la casa": "es una gran ventaja para mí haber pertenecido a La Merced" comenta Gómez. "Yo estudiaba y jugaba aquí, Mauro me lo ofreció y aquí estoy". La trayectoria que han llevado los equipos de fútbol sala que dirige este curso no es mala hasta el momento. "Los juveniles eran los primeros hasta hace una jornada, con los cadetes de primer año nos ha costado más arrancar", explica el entrenador.
Lo más dificil que se ha encontrado en su labor de técnico ha sido la organización del grupo. "Es complicado que se lo tomen en serio, el problema viene porque son todos amigos y se lo toman a broma, tenemos que hacer que lo pasen bien pero que también aprendan a competir de forma seria", se justifica Alex Gómez. Al igual que el coordinador, el entrenador también tiene su propia visión respecto al tema del título de los entrenadores: "Me parece que es algo muy raro, siempre lo ha llevado gente de la casa y ahora si exigen un título vendrá gente nueva que tendrá que conocer a los jugadores, me resulta más artificial. Es dificil encontrar una situación intermedia" se queja Gómez. Esfuerzo no va a faltar.