Pelear lo más arriba posible  durante el mayor tiempo posible

“Lo difícil no es ganar, es ganar, ganar y volver a ganar”. Así de ambicioso se ha mostrado Paco García en la previa del partido entre el UEMC Real Valladolid Baloncesto y el HLA Alicante. Un encuentro, el del sábado a las 19.00 horas, en el que los blanquivioleta buscarán la octava victoria del curso, mantenerse invictos en casa y seguir defendiendo la prestigiosa tercera posición de la liga que atesoran.

HLA Alicante. “Semana intensa, tercer partido en siete días. Llegamos con la esperanza e ilusión de poderla cerrar de manera brillante. Es maravilloso vernos terceros, da una satisfacción grande y ahora hay que defender el castillo con lo que haga falta. Estar aquí es producto de mucho trabajo y esfuerzo. Es un partido tremendamente complicado. Estoy preocupado con HLA Alicante porque juegan muy parecido a nosotros y nosotros jugamos bien, así que ellos, también. Tienen muchas similitudes en varias posiciones y es un equipo brillante, que por momentos ha hecho resultados brillantes, como la victoria ante Estudiantes, o saber reponerse de una derrota y ganar a continuación en Burgos. Con esa capacidad hay que tenerlos muy presentes. Se han reforzado con Rakocevic, un fichajón, a una plantilla ya de por sí importante en la que destacan Steinarsson, un clásico y de muchísimo nivel, ex jugadores del Club como el propio Rakocevic o Sylvester Berg. También está Matulionis, que sabe lo que es ascender, una promesa ya realidad como Arnau Parrado, Sean McDonnel, Edu Gatell, que me gusta muchísimo o Borovnjak. Un plantel tremendamente importante que esta ahí, si nos gana nos igualaría en la tabla. Llevamos muchísimos días sin perder en Pisuerga en liga regular y tenemos que seguir defendiendo esas opciones. Lo difícil no es ganar, lo verdaderamente complicado es ganar, ganar y volver a ganar, que diría el maestro Luis Aragonés”.

Derrotas a domicilio. “No era algo dramático para nosotros. Es la sensación de que la botella siempre se ve medio vacía. Me duele. Llevábamos 50 días sin ganar a domicilio, decían, que son dos partidos. Me gustaría ver mañana que llevamos 256 días sin perder en liga regular en Pisuerga. Cuando perdemos los malos somos nosotros. El Club y el equipo están habiendo un esfuerzo brutal y a veces pienso que cuando vienen de fuera se les tiene más respeto que a los de casa”.

Terceros cuartos. “No me preocupa en exceso la reacción de Oviedo el otro día. El partido dura 40 minutos y tenemos 5 malos, que no hay que ir al tópico de que nuestros terceros cuartos siempre son una porquería. De 10 hemos hecho siete buenos, dos regulares y uno malo. Hay veces que es bueno y magnifico. Sabíamos que iba a haber un momento de crisis en el partido, y lo importante era soportarlo y volver a ser nosotros”.

Trabajo coral. “Los 11 que juegan el otro día, suman y anotan. Es muy buena noticia. Había hablado con Kabasele sobre sus últimos tres partidos y el otro día juega por encima del aro, no toca el suelo, y ese es Kabasele. Puede llegar a jugar arriba si encuentra regularidad. Fue la bomba en Oviedo. Mazaira ve aro, Jordy Kuiper, con un ojo casi cerrado del golpe con Almansa, nos da dos triples en el inicio… todo el mundo va sumando y es lo importante. Tenemos a los 11 para jugar y titular podría ser cualquiera entre todos ellos. Nuestra buena lectura es ir metiendo más marchas según vamos moviendo al equipo. Es satisfactorio”.

Margen de mejora. “Veo a Andorra y Palencia un poquito por encima de los demás. Ahí están, con una derrota y un juego muy solvente y serio. Burgos ha pagado al inicio el desconocimiento de la liga, pero ahora están ya con varias victorias consecutivas, cogiendo velocidad de crucero y acorde al pedazo de equipo que tienen. Tienen que estar arriba sí o sí. Hay una serie de equipos, entre los que incluyo al HLA Alicante, que nos vamos a dar muchos mordiscos para entrar en playoffs. Quiero estar el mayor tiempo que se pueda luchando por estar lo más arriba que se pueda. Al equipo le pido ambición, el trabajo me lo dan. Entrenamos como animales, durísimo, y, a día de hoy, todavía tienen margen de mejora. Hay jugadores que pueden explotar y eso le da al equipo como grupo mucho margen”.

Maj Kovacevic. “Si llega a meter los dos tiros que tira, se va con un sobresaliente. Me gusta mucho su saber estar en la pista, su colocación y lectura de juego. Es la primera vez, exceptuando a Barnes, que fichamos a un jugador de 32 años y era una oportunidad de traer a un tío que conoce su trabajo, que lo conoce bien, que ha jugado en momentos y equipos importantes. Nos da un poso muy grande. Está contento, se ha visto arropado desde el minuto uno porque el grupo es fantástico. Él cree que tiene mucho que ofrecer. Estoy muy contento con su llegada”.