Cuatro clubes y un solo podio
Valladolid y Guadalajara fueron escenario de una Copa de España de voleibol que fue un exito de asistencia pero que obliga a una profunda reflexión sobre los equipos locales. Para algunos era su primera experiencia nacional y para otros, el resultado estuvo por debajo de las espectativas creadas.
Lo mejor llegaba con el equipo alevín de Maristas Inmaculada, que se alzó con el subcampeonato femenino después de perder la final con el intratable conjunto catalán de CV Esplugues. Sus hermanas pequeñas del Maristas Altis acabó en una más que meritoria quinta posición. En esta misma competición UVa Sanjo acabó en novena posición mientras que los dos equipos del CD Lourdes, que debutaban en una cita nacional, ocuparon las posiciones 12 (Arcas Reales) y 14 (Santa Espina) de un total de 18 equipos.
En alevín masculino el Club Bumayé se estrenó y acusó la falta de competición de nivel en su ciudad y región. En un liga con tan solo cinco equipos, lograron ganar un partido aunque terminaron en el farolillo rojo. Sus hermanos "mayores" vivieron una situación similar y en la Copa infantil ocuparon la posición decimoprimera. Además, en infantil femenino tomó parte un equipo de UVa Sanjo, que acabó en el puesto 19 de un totalo de 32.
De forma simultanea a la Copa en Valladolid se disputó una competición similar en Guadalajara, para las categorías cadete y juvenil. En el segundo nivel cadete el equipo de San José se situó en el puesto 22, mientras que en la posición 23 acabó el Lourdes Silverstorm Castella dentro del nivel 3.
Por último en juveniles, UVa Sanjo fue quinto en el nivel uno mientras que sus compañeras del nivel dos terminaron séptimas. En esa misma competición, el Lourdes Silverstorm Stella terminó decimoquinto de un total de 26 clubes participantes.
