Voleibol  |  Primera División Femenina

3-2: Remontada de corazón

7 de Diciembre de 2014
Escrito por
Javier Garcia

Hay partidos que se ganan más con el corazón que con la técnica, táctica o cualquier otra cosa. Partidos que se complican no sabes muy bien por qué y tienes que tirar de latidos para sacarlos adelante. Uno de esos choques es el que ha vivido esta tarde la Universidad de Valladolid ante su homónimo burgalés.

Un encuentro que se puso muy en contra para los intereses pucelanos que tuvieron que remontar dos sets ante un aguerrido equipo para llevarse una trabajada victoria que las mantiene en lo alto de la Primera División Femenina.

No fue el mejor partido ni mucho menos de las jugadoras de la UVa como se puso ver en las primeras mangas donde las visitantes dominaban la red, el ritmo y cometían muchos menos errores que las locales. El primer set fue un cúmulo de despropósitos por parte pucelana que llevaban una caraja monumental no vista aún en toda la temporada. El técnico pucelano no sabía qué hacer y era testigo de primera fila de cómo el primer tanteo caía del lado burgalés (21-25).

Un técnico que, entre sets, intentó alentar a las suyas para que "jugaran a algo" en la segunda manga. Una charla que sirvió para que las chicas de la UVa saltaran a la pista de Fuente la Mora más concentradas durante los primeros compases (11-8), aunque la igualdad, de nuevo, iba a ser la tónica de esta manga, por lo que cualquier error se pagaría caro. Las pucelanas no acababan de carburar y echaron por tierra la ventaja de la que contaban metiendo a sus rivales en el set (18-17).

Pero no parecía que las líderes tuvieran su día y también claudicaron ante las burgalesas en el segundo acto por 22-25. La UVa necesitaba reaccionar sí o sí y fueron las propias jugadoras quienes se animaron al grito de "jugar como un equipo" antes de comenzar el tercer set. Las burgalesas, sabedoras de lo cerca que tenían la victoria, apretaron desde el inicio pero las chicas de la UVa, más enchufadas, les siguieron la estela (13-11) en busca de la remontada. En el rouge final, las locales se mostraron más seguras y fuertes en la red y consiguieron llevarse la manga (25-21).

Y hasta ahí duró la Universidad de Burgos. Las vallisoletanas tiraron de orgullo, de buen hacer, y de corazón, de mucho corazón para volver a ser esas jugadoras dinámicas que dominaban la liga. La cuarta manga fue una lección maestra de cómo se tiene que jugar cuando uno no tiene uno de sus mejores días y cayó con claridad del lado local (25-8).

Con las visitantes casi sin recursos y unas locales envalentonadas, llegó el último y definitivo set donde las pucelanas no tuvieron rival y se impusieron con facilidad por 15-5, haciendo posible el pleno de victorias para un total de 23 puntos.